El fútbol vuelve a sonreír a Fran Rico

En Mareo tuvo un paso corto pero nadie tiene un mal recuerdo de Fran Rico. Poco más de 50 días pudo disfrutar de su cargo de secretario técnico del Sporting de Gijón. La llegada del Grupo Orlegi derivó en cambios profundos en la infraestructura de la Escuela de Mareo, haciendo saltar por los aires a la dirección deportiva vigente. Javi Rico y su equipo salieron del organigrama del club. Entre ellos, un Fran Rico que apenas tuvo tiempo de disfrutar de su nueva posición. Ahora, el fútbol le recompensa. 

Ya tocó metal el año pasado y está a las puertas de volver hacerlo. Bajo la sombra de José Luis Mendilibar, Fran Rico está cerca de conseguir su segundo título continental consecutivo. Como segundo entrenador del Olympiacos, el gallego conseguía ayer su billete para la final de la Conference League tras eliminar al gran favorito. El Aston Villa de Unai Emery no podía doblegar a los del Pireo y caía derrotado también en la ida (2-0) gracias a un doblete de El Kaabi, autor de cinco de los seis goles griegos en la eliminatoria. 

De este modo, Fran Rico buscará engordar más si cabe su nómina como técnico. Tras debutar en el Sevilla con Mendilibar y conseguir una Europa League en el primer intento, el gallego busca ahora una Conference League que añadir a su historial. Su rival será el Fiorentina y la final se disputará en Atenas, lo que motivará más si cabe al cuadro heleno para llevarse la primera final europea de su historia. 

Del éxito de la temporada, que puede redondearse más todavía con el trofeo, tiene su trocito de culpa Fran Rico. Despedido de Mareo sin tiempo apenas para plantear un proyecto deportivo, los banquillos le han brindado un bonito aterrizaje. Ese que no tuvo en Mareo. Fran llegó bajo el mando de Javi Rico, algo que le pasó factura con la llegada de la nueva propiedad. 51 días en el cargo hasta su destitución como parte de la dirección deportiva vigente. Entraba dentro del equipo de trabajo del exdirector deportivo y la salida de este arrastró a un Fran Rico que, quizás, pagó más platos rotos de la cuenta.

El fútbol devuelve ahora las alegrías a un Fran Rico que despachó una amplia carrera como futbolista. En Ipurúa entabló una amistad con José Luis Mendilibar que, años después, le abriría la puerta de los banquillos. En aquel Eibar también coincidió con dos jugadores del Sporting actual. Cote y Christian Rivera formaban parte de aquella plantilla en la que ocupaban un lugar los mimbres de un cuerpo técnico exitoso a día de hoy.