El Oviedo pone el candado y sienta la base del próximo curso
El conjunto azul ha renovado a su defensa titular al completo y comenzará la pretemporada con gran parte de la plantilla
La continuidad. Ese término tan buscado en el mundo del fútbol y a la vez tan complejo de conseguir. Uno de los tópicos más habituales, pero que no por ello deja de ser cierto. Ya lo decía Sangalli: “A veces parece que juegas un poco a la lotería, a ver si compras muchos boletos y te toca. Es importante tener estabilidad y dar continuidad a proyectos”, aseguraba hace semanas. Y parece que el conjunto azul comienza a dar esos pasos para asentarse definitivamente.
En los despachos, todo va sobre ruedas. Con el entrenador renovado y la dirección deportiva trabajando a pleno rendimiento, los focos se centran en lo deportivo. El Oviedo iniciará la pretemporada con gran parte de la plantilla a las órdenes de Álvaro Cervera. Y es que hay que echar la vista muy atrás para encontrar un curso en el que estuviera tan avanzada la planificación en pleno mes de junio.
Uno de los aspectos más fundamentales para el técnico es la defensa. A partir de ella sus equipos crecen y así lo ha demostrado también durante sus meses en Oviedo. “Estoy más cómodo defendiendo”, admitió en varias ocasiones. Y en Asturias ha encontrado una plaza que le viene muy bien por las características y el nivel de la zaga. Por si fuera poco, Pachuca se ha movido rápido y bien: en apenas ocho meses toda la defensa titular ha ampliado su vinculación con el Oviedo.
El primero en hacerlo fue Abel Bretones, allá por el mes de octubre, cuando aún no era titular. El langreano, que firmó hasta 2026, fue la gran revelación de la temporada y experimentó un notable crecimiento hasta ser indiscutible en el costado zurdo y, si ningún equipo presenta una oferta importante por él, continuará galopando por la banda del Tartiere.
Meses después, concretamente en febrero, fue el turno de Dani Calvo. El oscense acababa contrato este mes de junio, pero el Oviedo le convenció y amplió la vinculación de uno de los mejores centrales de la categoría hasta 2024. A continuación fue el turno de Lucas Ahijado, el mejor jugador carbayón de la temporada, que en abril selló con su firma una vinculación por dos temporadas más, hasta 2025.
Faltaba la guinda, la renovación de, tal vez, el líder de la zaga, a pesar de que este año no pudo demostrarlo por las sucesivas lesiones que le han lastrado. El club anunció en la mañana del lunes la ampliación de contrato de David Costas hasta 2026. El gallego se mostró “muy feliz” y quiso lanzar un mensaje de optimismo a la parroquia carbayona. “intentaré devolver la confianza sobre el campo. A ver si somos capaces de conseguir grandes cosas juntos”, aseguró.
De esta forma, el conjunto azul da continuidad y consigue retener la parcela que mayor rendimiento ofreció la temporada pasada, capital para su técnico. Además, a excepción de Bretones, que llegó el curso pasado, el resto completará su tercera temporada consecutiva juntos, un aspecto siempre a tener en cuenta. A lo largo de estas últimas campañas, la conexión entre Costas y Calvo ha sido evidente, y este año podrán seguir mejorando sus registros.
Junto a ellos, estarán Luengo, Pomares y Tarín, que continúa recuperándose de su lesión de ligamento cruzado. Los tres buscarán hacerse un hueco en el once y contar con más participación que el curso pasado. Precisamente, los dos centrales también tendrán su oportunidad por la banda derecha. La dirección deportiva entiende que con el gran nivel mostrado por Lucas y su fiabilidad a nivel físico –uno de los pocos jugadores sin lesión este curso– la posición puede estar bien cubierta. En caso de necesidad, será Luengo, Tarín o incluso Charbel los que ocupen su puesto, salvo que aparezca una oportunidad de mercado muy ventajosa para el club.