Entre lágrimas y con "una espinita clavada": El adiós de Diego Mariño

El portero rojiblanco se quiso despedir del sportinguismo con un sentido video en el que no pudo contener la emoción

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Diego Mariño
Diego Mariño, en un entrenamiento en Mareo
Jue, 26/01/2023 - 13:45

Se va un sportinguista. Diego Mariño quiso mandar un último mensaje a la afición del Sporting de Gijón tras hacerse oficial su salida al UD Almería. El portero gallego cerró así una etapa de seis años y medio defendiendo la camiseta rojiblanca durante 222 partidos en los que ha conseguido ser una de las piezas más reconocidas de la historia reciente del club. Una vez hecho oficial su adiós, el de Lugo se quiso despedir a través de un sentido vídeo. 

Quiso empezar Mariño con los agradecimientos. "Dar las gracias al club, a la afición, del primero al último. Gracias a los compañeros y entrenadores, a todos los trabajadores del club, oficinas, limpiadoras, fisios… todos con los que he compartido momentos", explicó el portero antes de dar paso a los motivos de su adiós. 

"Es una decisión difícil pero viendo las connotaciones que se dan, terminando contrato en junio, la oferta del Almería que es uno de los últimos trenes para jugar en Primera división. Es un reto ilusionante y una oferta que no puedo rechazar. De ahí la rapidez en todo", comentó al vigués antes de dar paso a la parte más emocional de su discurso. 

"Quiero dar las gracias y agradecer el trato en Gijón conmigo y con mi familia. Todo lo que me habéis dado, como me habéis hecho sentir, el cariño que he tenido por todo el mundo desde el primer momento. Igual no es la despedida que más me hubiera gustado", dijo, ya inundado en lágrimas. "Mi sueño era devolver al equipo a Primera división y no lo hemos podido cumplir. Es una espinita clavada que siempre voy a tener clavada en mi interior. Espero que el club vuelva cuanto antes a Primera división y que todos podáis disfrutar de esa categoría", completó, muy emocionado, Mariño.

"No podía irme sin decir nada después de todos estos años, de lo que me habéis hecho sentir. Estaré eternamente agradecido. Os lleváis cuatro sportinguistas (hablando sobre su familia) de corazón para toda la vida y os deseo lo mejor para el futuro. Ojalá pueda volver ya como aficionado desde la grada y disfrutar de ese ascenso que todos llevamos años deseando", finalizó el gallego. Un mensaje emotivo que pone punto y final a una etapa de seis temporadas y media en Gijón. Un adiós entre lágrimas para un jugador que siempre ha defendido con orgullo la camiseta y el escudo del Sporting de Gijón.