"Espera lo mejor, prepárate para lo peor y acepta lo que venga"

Miguel Ángel Ramírez ya sabe lo que es conseguir éxitos al llegar a un banquillo a mediados de temporada

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RAMIREZ
Miguel Ángel Ramírez, durante su etapa en Charlotte
Lun, 16/01/2023 - 10:30

Un perfil desconocido en el fútbol español. El nombre de Miguel Ángel Ramírez Medina es uno de esos casos en los que un entrenador se crea así mismo. Desde la base hasta rozar el primer nivel. El entrenador canario que si nada se tuerce se convertirá en nuevo técnico del Sporting de Gijón rompe con los moldes de la mayoría de preparadores del fútbol actual. Sin un pasado como futbolista, la pasión por el deporte le llevó a adentrarse en la formación. Desde la base de Las Palmas, Ramírez fue dando pasos en firme hasta situarse a las puertas de un histórico como el Sporting. 

"Espera lo mejor, prepárate para lo peor y acepta lo que venga". Esa es una de las frases 'mantra' del preparador insular que le ha acompañado a lo largo de su corta trayectoria en el mundo de los banquillos. Muy venerado en Qatar por su trabajo junto a la Academia Aspire, los focos mediáticos le alcanzaron en Ecuador. La situación, salvando las distancias, no le sería extraña en Gijón. En el Independiente del Valle se hizo con los mandos del equipo a mediados de temporada. La salida de Ismael Rescalvo del banquillo le hizo bajar al césped en la jornada 13. No era lo esperado, pero la buena sintonía con la directiva y la plantilla le dio la oportunidad. Tenía su confianza. 

Y no la desaprovechó. A pesar de que en la liga los resultados no fueron brillantes, en la Copa Sudamericana puso su nombre en el mapa. De la mano de un equipo que no había conseguido ningún título, consiguió dejar en el camino a rivales de entidad como Independiente de Avellaneda o Corinthians. Ya en la final, doblegó a Colón de Santa Fe, equipo argentino que cargaba con la vitola de favorito. Fue su carta de presentación en el mundo del fútbol. Y también su entrada en el radar de Orlegi

Ese buen hacer le abrió las puertas de un grande en Sudamérica. El Internacional de Porto Alegre brasileño le ofreció un proyecto a largo plazo que aceptó para seguir creciendo. La aventura brazuca no fue tan bien como se esperaba. En un país que vive por y para el fútbol, la falta de resultados le hizo abandonar demasiado pronto. Pero su buen nombre seguía pululando por el continente americano. Ahí surge una alternativa novedosa. El Charlotte, equipo de nueva creación en la MLS, le abrió la puerta de una liga más que llamativa. 

Fue otro paso corto. En 14 partidos, tan solo consiguió vencer en cinco. Algo que se podría entender teniendo en cuenta la nueva creación de la franquicia americana. Poca paciencia. "Es una decisión difícil, pero creemos que es lo mejor para el equipo en este momento. Quiero dar las gracias a Miguel y a su cuerpo técnico por su trabajo en esta primera temporada y le deseamos lo mejor para el futuro", fueron las palabras del dueño de Charlotte David Tepper. Hasta ahí, su última aventura. 

Desde entonces, se le ha podido ver disfrutando del fútbol. Ha podido vivir el Mundial de Qatar en primera persona en un país en el que mantiene un gran nombre por su trabajo en Aspire. También ha estado en su isla natal disfrutando del fútbol. Estuvo en la Copa del Rey viendo el partido que medía a El Paso con el Espanyol. Una competición en la que, si nada extraño ocurre, se estrenará a los mandos del Sporting de Gijón. Un técnico creado así mismo y que buscará ampliar el buen nombre que tiene en Sudamérica a su país natal.