La guillotina rojiblanca vuelve a pender sobre Anduva
Al igual que ya pasó en 2022, el Sporting vuelve a visitar a un Mirandés en apuros con su entrenador cuestionado antes de medirse a los rojiblancos
CD Mirandés
Alescio Lisci busca esquivar la misma suerte que corrió Lolo Escobar. Los dos con un mismo condicionante. El Sporting de Gijón vuelve a cruzarse en el camino de un Mirandés en apuros. Peleando con uñas y dientes por permanecer un curso más en el fútbol profesional, el equipo de Anduva iniciará la jornada 34 con cuatro puntos de margen con la zona de descenso. Todo a raíz de un 2024 en el que solo han conseguido dos victorias. Por eso, las dudas se agolpan en Miranda de Ebro.
El Mirandés mantiene la confianza en el entrenador italiano a pesar de todo. Sin embargo, desde tierras burgalesas sitúan el partido ante el Sporting como clave en la continuidad de Lisci al frente del banquillo local de Anduva. No apunta a ser un partido a cara o cruz para el extécnico del Levante, pero sí que podría marcar un nuevo punto negro en la temporada de Anduva y motivar posibles cambios en el banquillo. Lisci, en la previa, se mostró molesto acerca de las voces que hablaban de una posible destitución. Todo ello con el Sporting en el camino. Algo nada nuevo en Anduva.
El Sporting de David Gallego aterrizaba en Miranda en 2022 envuelto en dudas. El equipo rojiblanco, inmerso en una mala racha de resultados, se jugaba el cuello de su entrenador ante otro técnico dolido. Lolo Escobar también se jugaba su puesto al frente del banquillo del Mirandés. Finalmente, el que saltó por los aires fue el local. El Sporting goleó (0-3) y Gallego aguantó en el puesto varias semanas más, No así Lolo Escobar que sería despedido un día después de la derrota. Su salida dio paso a la llegada de Joseba Etxeberría, técnico que consiguió el objetivo de la permanencia.
En la previa del choque, Alescio Lisci negó las dudas y llamó a la unidad jabata antes del partido. "No percibo que haya otra sensación en la calle que no sea la de confiar, la gente me para todos los días y me da ánimos para que sigamos. Pero sí que sé que hay alguien que está tratando de dividirnos. Esto es como la frase famosa que dice divide y vencerás, nosotros tenemos que estar juntos y unidos", dijo el italiano antes de medirse al Sporting.
Acerca de los rojiblancos, Lisci mostró sus dudas acerca del posible planteamiento rojiblanco para la cita. "No sé la idea que tienen para este partido, si les puede valer el empate o no, si irán a por el partido o no en los últimos minutos", dijo. En el otro lado, Miguel Ángel Ramírez le dio la respuesta. "Si no somos nosotros los que vamos con el cuchillo entre los dientes, no vamos a ser capaces de competir. Tenemos que ir con más hambre, más deseo, más agresividad en cada minuto. Tenemos que ser eso para poder ganar", explicó el canario.
