La mala suerte se ceba con el Oviedo: Es el equipo español con más lesiones de ligamento cruzado

Parecía una mañana tranquila en El Requexón mientras los jugadores realizaban los últimos ejercicios antes de finalizar la sesión. Pero en una de esas acciones, Mario Hernández sufrió una torsión en su rodilla. De inmediato, saltaron las alarmas en la ciudad deportiva azul y tras realizar las pertinentes pruebas médicas se confirmaron los peores presagios: Mario se había roto el ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda, por lo que se perderá prácticamente lo que resta de temporada. 

Su lesión es la gota que colma el vaso en el conjunto azul, que en los últimos seis meses ha sufrido tres dolencias de este tipo. Primero fue Rodri Tarín en un encuentro ante el CD Mirandés, allá por el mes de marzo, y luego fue el turno para Álex Millán en el amistoso veraniego ante Pachuca. La desgracia se volvió a cebar ayer con el Oviedo, en una situación casi inédita en el mundo del fútbol. 

De hecho, comparando la situación en el panorama nacional, ningún club profesional tiene a tres futbolistas afectados por esta dolencia como le ocurre al cuadro carbayón. En Segunda División, el 50% de jugadores afectados pertenecen al Oviedo (3/6). Solo hay otros tres aparte de los azules, que son Álex Martínez (Eldense), Javi Alonso (Tenerife) y Christos Albanis (Andorra). 

Y en Primera el número se eleva hasta los 12 casos. Algunos equipos como el Real Madrid (Courtois y Militão), el Getafe (Enes Ünal y Gorka Rivera) o el Girona (Toni Villa y Joel Roca) tienen a dos jugadores afectados. El resto, solo con a uno y en la mayoría de casos a ninguno. Son Panichelli (Alavés), Svidersky (Almería), Reinildo (Atlético de Madrid), Fekir (Real Betis), Brasanac (Osasuna) y Coquelin (Villarreal). En los últimos tiempos cada vez más equipos sufren este tipo de dolencias y muchas personas en el ámbito del fútbol lo relacionan con la elevada carga de trabajo y el cansancio al que se someten los futbolistas. 

En el caso del Oviedo, la situación trae de cabeza a Álvaro Cervera, que hace una semana ya se lamentaba por la situación. "Tenemos seis bajas (ahora ocho) y no hay ninguna muscular (ahora la de Ibarra). No sabes por dónde mirar. Entrenamos con un cuidado tremendo, lo llevamos todo al dedillo para que ningún jugador se fatigue muscularmente... Me gustaría tener más fondo de armario pero nunca me voy a quejar. Con lo que tenemos podemos hacer lo que tenemos que hacer. No somos como otros equipos que si les falta uno cambia todo, aquí podemos poner a otro". Por lo pronto, tendrá que reiventarse porque no hay ningún lateral derecho puro en la plantilla.