La parada que garantiza vida casi hasta el final
La intervención de Rubén Yáñez en Miranda puede ser definitiva para las aspiraciones rojiblancas en esta recta final de temporada
El Sporting de Gijón afronta estas últimas seis jornadas en los puestos de play off, donde prácticamente ha estado durante toda la temporada ya disputada en Segunda división. El penalti parado por Yáñez ante el Mirandés en la jornada 34, junto a la reacción colectiva en la segunda parte, asegura tener a tiro la sexta plaza, como mínimo, hasta que falten cinco jornadas para el final.
La historia podría haber sido distinta si Rubén Yáñez no hubiese sostenido a los suyos en Anduva. El penalti que detuvo, que pudo haber sido el 2-1 antes del descanso, impulsó la reacción del Sporting. Después, el técnico Ramírez introdujo dos cambios determinantes para la victoria. Tres puntos que, sumados a los obtenidos contra el Cartagena, devolvieron al equipo gijonés a los puestos de play off.
Eso sí, las distancias siguen siendo mínimas. El conjunto gijonés ocupa la sexta plaza con los mismos puntos que el Oviedo, que es séptimo por el golaveraje particular entre ambos. Por debajo hay otros cuatro equipos con opciones a solo uno, dos y tres puntos. No hay margen para el error, pero al menos sí esperanzas prácticamente hasta el final.
En ese sentido, el Sporting mantendrá sí o sí su puesto de play off si es capaz de superar este domingo al Villarreal B. Eso supondría que, como mínimo, los de Ramírez afrontarían la visita del Andorra, a falta de cuatro jornadas, con la promoción por el ascenso a menos de tres puntos. Después ya solo quedarían tres jornadas.
Teniendo en cuenta los antecedentes recientes, la actual campaña está siendo más que positiva. El equipo rojiblanco ha coqueteado con el descenso en los dos últimos cursos, mientras que tras su descenso en 2017 tan solo ha tenido opciones similares a las presentes en las temporadas 2017-18 y 2020-21.
Por todo esto, la cita de este fin de semana es trascendental, así como todas las que quedan, Sin embargo, y a pesar de que el objetivo marcado vuelve a ser muy ilusionante, el ambiente no es tan extraordinario como en años anteriores. El ritmo de venta de entradas, tras la promoción finalizada el pasado viernes, se ha ralentizado. A estas horas se han vendido unas 3.000 localidades.