La sensación contradictoria de Róber Pier

Sobre el papel, Róber Pier está llamado a ser el central de mayores garantías de la plantilla del Sporting de Gijón. Tiene casi tantos partidos en Primera como en Segunda división, más de 100 en cada categoría, y a lo largo de su trayectoria casi siempre ha sido titular con todos los entrenadores que le han dirigido. Una confianza que Rubén Albés también le está dando esta temporada. Sin embargo, su rendimiento está por debajo de lo esperado.

Un problema de pubis, que venía arrastrando desde el final de la temporada pasada, le impidió hacer la pretemporada. Se perdió las dos primeras jornadas, reapareció en Almería con menos ritmo que sus compañeros y esperó dos jornadas más para ser titular en la visita a Tenerife. Desde entonces no se ha caído de la formación inicial.

Su continuidad no ha estado respaldada por su nivel. Inferior al que acostumbra. Esta campaña ha completado buenos partidos y otros no tanto. Sin ir muy lejos, recientemente jugó muy bien en Riazor o incluso contra el Castellón y todo lo contrario frente al Cartagena, Racing Ferrol o Málaga.

Quizá lastrado por ese problema de pubis, quizá no esté compitiendo al 100%, para Róber Pier está siendo una campaña contradictoria por irregularidad y curiosamente por su faceta goleadora. Lleva dos tantos, los marcados en Tenerife y Miranda de Ebro, lo que supone su mejor marca goleadora en el fútbol profesional. Desde su debut en la 2015-16, hace ya nueve campañas, nunca antes había marcado más de un tanto.

Recurriendo a las palabras de Rubén Albés, el descanso en estas Navidades puede ser el mejor aliado para el central gallego. A sus 29 años no tiene contrato para el próximo curso, por lo que deberá recuperar su verdadero nivel para mantener o mejorar sus condiciones en el Sporting o en el equipo que sea. Al respecto, la entidad asturiana aún no se ha puesto en contacto con su agente para tratar una posible ampliación de capital.