Las notas del Sporting: Cada vez más complicado de entender

Un partido que se define en tres partes. Un mal comienzo, un buen tramo de segunda parte y un mal final tras una corrección táctica. El Sporting de Gijón volvió a ser víctima de sí mismo. Los jugadores en el centro del campo cumplieron diferentes roles a lo largo de la tarde y la sensación generalizada es que nadie sabía ciertamente el papel que tenía que ocupar. Un cambio de Ramírez (Zarfino por Queipo) dio pie a tres cambios de posición distintos. Un caos organizativo que terminó con una nueva derrota y la cercanía con la zona de descenso. En Killer Asturias ponemos notas a las actuaciones individuales de los jugadores del Sporting. 

Cuéllar (5): El codo de Mika Mármol le libró de un fallo de posicionamiento en una de las primeras llegadas del Andorra. Luego realizó una buena parada en un disparo de Valera. No tuvo más intervenciones en el partido, salvo el penalti en el que no adivinó el lanzamiento. 

Pol Valentín (4): Ramírez siguió apostando por él para la titularidad. El nuevo sistema le da toda la banda para él y se siente cómodo. Le costó tapar las internadas de Almpanis, sobre todo en la primera parte. 

Cali Izquierdoz (2): Cometió dos penaltis. El que menos parecía ser fue el sancionado. El primero, el que le libra el VAR, es un error impropio de un jugador de su experiencia. Y no es el primero de la temporada. Necesita volver a ser el que fue en el primer tramo de temporada. El Sporting también lo necesita. 

Insua (4): En la línea general de la defensa. El gallego no cometió errores de bulto pero dejó sensación de pasividad ante las internadas de los jugadores del Andorra en la zona del área. 

Marsà (5): Volvió a ser de las pocas notas positivas. En el esquema de tres centrales es el que más se anima y con acierto. El descanso le llevó al lateral donde mejoró las prestaciones de Cote. 

Cote (3): No estaba a tope y Ramírez lo dejó al descanso en el banquillo. Valera le desbordaba con mucha facilidad y se le veía incapaz de frenar al jugador andorrano. Urge recuperar al Cote de inicio de temporada. 

Pedro Díaz (4): El termómetro del Sporting una vez más. Cuando aparece el equipo juega. Cuando pasa por el partido más de refilón el equipo se muestra perdido. Con el cambio de sistema tras el descanso se animó pero no tanto como otras ocasiones. 

Zarfino (4): Multiusos total. Ramírez lo nubló a base de cambiarle la posición. De pivote, de interior, de mediapunta. Lo hizo todo en un tono medio, sin brillar excesivamente. El equipo echa en falta sus llegadas desde la segunda línea que tanto peligro le había dado al Sporting en el primer tramo de temporada. 

Cristo (4): Voluntarioso pero sin acierto el canario a lo largo de su participación en el partido. No tuvo ocasiones de gol y eso lastra. Fue uno más de los que tuvo que adaptarse a una posición nueva. 

Aitor García (2): No le sale nada. El onubense está atravesando uno de sus peores momentos desde que viste la camiseta del Sporting de Gijón. Ramírez lo dejó en el vestuario antes de empezar la segunda parte. En Andorra le faltaron conexiones con el resto de atacantes y una punta de velocidad en varias ocasiones en las que podía correr. 

Djuka (3): Si se pudiera olvidar que la principal tarea de Djuka es marcar goles, su partido no fue malo. Combinó bien con sus compañeros y generó peligro. Pero se le juzga, y es normal, por los goles. Esos que parece haber olvidado cómo se hacen. Falló dos nuevas ocasiones de las que no fallaba hace una temporada. El entrenador sigue confiando en él y se le nota dolido por no poder corresponder. 

Los cambios

Varane (4): Un proceso febril le apartó de más minutos. El galo salió a cumplir con el rol de pivote defensivo. Empezó bien su participación pero se fue diluyendo con el paso de los minutos inmerso en el caos organizativo de los últimos 20 minutos. Le faltó colocación, el Andorra le pilló fuera de zona en varios momentos. 

Otero (4): Su perfil activó al Sporting en la segunda parte. Rápido a la espalda de la defensa del Andorra hasta que el reajuste de Ramírez le lastró. Su aportación fue yendo a menos. 

Milo (4): Entró por Djuka y pudo conseguir un punto pero Nico Ratti evitó su primer gol en liga con un paradón. Demuestra que puede ofrecer algo diferente. 

Queipo (4): Resulta curioso. Entró al partido un jugador vertical como Dani Queipo y el equipo dejó de ser vertical. La posición en la que le ubicó Ramírez le privó de sus cualidades. 

Campuzano (4): Salió tras el gol del Andorra. Como el resto de delanteros del Sporting dispuso de su ocasión pero no la materializó. 

El entrenador 

Miguel Ángel Ramírez (2): Partido en tres partes. Mala lectura previa, buena corrección tras el descanso y mala corrección sobre la corrección. El Andorra dominó al Sporting en la primera parte ante la pasividad rojiblanca. Tras el descanso rompió la línea de tres centrales con mucho acierto y el equipo empezó a jugar. Cuando mejor estaba el Sporting, un nuevo cambio volvió a liar a sus jugadores. Cambió demasiado de posición a las piezas del centro del campo. Es momento para ser prácticos.