Los ocho traspasos del Sporting de Orlegi y su única compra
La empresa mexicana está limitando las pérdidas con la venta de jugadores, en su mayoría, jóvenes y formados en Mareo
Hay quien dice que la Escuela de Fútbol de Mareo es un pozo sin fondo para un equipo como el Sporting de Gijón. Sin embargo, y a pesar del gasto anual que supone su funcionamiento anual, lo cierto es que hay ocasiones en las que se autofinancia. Los traspasos sujetan la economía en Segunda división y a su vez permiten un escalón salarial en la plantilla que debería dar más resultados.
Desde la llegada del Grupo Orlegi, el Sporting ha traspasado a ocho jugadores en cinco mercados. Por contra, solo hizo la compra en propiedad de Uros Milovanovic, que tuvo lugar en su primera ventana para los fichajes. Las ventas fueron las de Manu García, Diego Mariño, José Gragera, Pol Valentín, Pedro Díaz, Varane, Fran Villalba y Djuka. La mitad de ellos pasaron por el filial del Sporting. Incluso tres fueron canteranos en categorías aún más inferiores, siendo sus traspasos los más generosas para las arcas.
Eso sí, las cantidades por las que Djuka y Villalba fueron vendidos a Atlas y Santos Laguna, respectivamente, se desconocen. Las cifras no han trascendido y a través de las cuentas no será sencillo identificarlas. Más que nada, no toda la totalidad de la venta de un jugador se contabilizada en un mismo ejercicio o presupuesto próximo.
En cualquier caso, con un cálculo aproximado se puede deducir que la entidad asturiana ha cerrado por más de 9 millones de euros las ventas de Manu García, José Gragera, Pedro Díaz y Jonathan Varane. La suma de las cuatro. Fueron considerablemente menores los ingresos por Pol Valentin y Diego Mariño, mientras que se desconoce lo obtenido por Fran Villalba y Uros Djurdjevic.
Por todo esto, dado el volumen de traspasos, puede llamar la atención los notables déficits acumulados en cada uno de los últimos ejercicios. Para el que ya ha cerrado el 30 de junio de 2024 se había presupuestado un balance negativo de 5,8 millones de euros, Pérdidas que finalmente se han reducido tal y como quedará reflejado en las cuentas que se presentarán para su aprobación en la próxima Junta de Accionistas. En cambio, las últimas aprobadas, las del ejercicio 22-23, concluyeron con un déficit de 5.096.575 euros.