Mejor así: Menos sensaciones y más puntos para el Real Oviedo

Llega el momento de la verdad. Es cierto que aún queda mucho por competir y por lo que pelear, pero el Real Oviedo está ante dos semanas que pueden marcar el futuro del equipo en la tabla clasificatoria. Los encuentros ante Girona y Valladolid son vistos como los dos más relevantes de la temporada, al menos hasta la fecha. El de este domingo en Montilivi (21:00) es una ocasión idónea para poder afrontar la próxima semana en posiciones de promoción de ascenso, aunque habrá que esperar también a lo que haga el Ibiza en El Toralín ante la Ponferradina (domingo, 16:00). 

Llegados a la jornada treinta de campeonato, los puntos son cada vez más caros. Un hecho que refuerza aquello de que, en estos momentos, poco importan las sensaciones mientras consigas los puntos. Es decir, que en la rula apuntan, no preguntan. Un hecho sobre el que el Real Oviedo ha crecido durante buena parte de la temporada y que ahora quiere recuperar. Los azules se han llevado muchos encuentros siendo diferenciales en las áreas, tanto en la propia como en la rival. Un aspecto muy distinto a lo vivido la campaña pasada, donde muchas veces se dijo que lo que transmitía el equipo estaba muy por encima de los puntos que marcaba la clasificación. En definitiva, que las sensaciones eran mejores que los puntos.

De cara al duelo del domingo ante el Girona, el Real Oviedo espera recuperar la solidez defensiva que le ha caracterizado a lo largo de la temporada. Para ello, Ziganda podría volver a utilizar un dibujo alejado del 4-4-2 que vimos la pasada semana ante la Real Sociedad 'B' y en la casi totalidad de encuentros de la temporada. El regreso de Brugman hace pensar que podrían ser tres los mediocentros que emplee el navarro de inicio en Montilivi. Sea como sea, los carbayones tratarán de volver a sumar los tres puntos a toda costa. Porque ha llegado el tramo de temporada en el que lo importante son los dígitos que sumes al casillero, no las sensaciones.