"Queremos ir a Oviedo, pero a un precio unitario y lógico y asequible"

Los derbis asturianos centran la actualidad deportiva en la región, aunque como viene siendo habitual no todo se centra en lo que pasa sobre el verde. Viene siendo costumbre, no especialmente positiva, que entre los despachos y los cruces de intenciones se focalicen las conversaciones sobre el duelo entre Real Oviedo y Real Sporting de Gijón. En esta ocasión, no llegó la excepción. A más de tres semanas para el duelo regional, el asunto de las entradas está dando que hablar. 

La decisión adoptada por el Sporting de Gijón de no hacer uso de todas las entradas ofrecidas por el Oviedo ha sido acogida desde diferentes prismas. El motivo de la negativa rojiblanca se debe a la diferenciación de precios que el conjunto carbayón hace entre las entradas para la zona visitante. El precio de 60 euros al que se situaban las 580 entradas extras que el equipo ovetense enviaba a Gijón no han sentado bien en el seno rojiblanco. Por ese motivo, el Sporting ha tomado la decisión de decir “no”. 

“Desde UNIPES estamos totalmente a favor de la postura del Sporting de rechazar las de 60. Los aficionados no pueden pagar un precio distinto estando en la misma zona. El Oviedo, creemos, que quiso gestionarlo así con un ánimo incluso de enturbiar el ambiente en la afición del Sporting”, explica Gustavo Alonso, presidente de UNIPES. 

“Todos los clubes intentan aprovecharse de los aficionados. No les parece poco lo que ganan con la televisión o las camisetas, todo les parece poco. Estoy muy a disgusto con todos. Todo es pagar para el aficionado. Deberíamos decir que no a ir a los estadios”, añade Jorge Guerrero, presidente de la FPS. 

Desde UNIPES, respaldan la postura del Sporting de Gijón de rechazar la mitad del paquete de entradas. “Nuestra postura es ir a Oviedo, pero a un precio unitario y lógico y asequible. No pagar dos precios en la misma zona. La postura del Sporting de rechazar la de 60 euros nos parece oportuna u correcta”, explica Alonso. El club se puso en contacto la semana pasada con las agrupaciones rojiblancas para trasladarles la situación y dibujar una respuesta conjunta. 

Sin embargo, la respuesta no paliará el problema. “El tema es que hay demanda. Seguro que la gente se buscará la vida para pagar las entradas a 60 euros. También es problema del aficionado, que no siempre está unido. Habría que plantarse todos y decir que esto no es manera de entender el fútbol”, concluye Guerrero. Una respuesta a la que también se añadieron aficionados a través de las redes sociales. “Que nos dejen decidir a nosotros si queremos pagar 60 euros o no”, se podía leer en X. Faltan tres semanas y el derbi asturiano ya está en el horizonte. Como viene siendo habitual, no por motivos deportivos.