Un fin de semana en blanco para Nico Riestra

Desde Mareo, pies en el suelo. El despegue de Nico Riestra ha generado mucho comentario hacia las cualidades de una de las perlas de la cantera del Sporting de Gijón. El club aboga por la calma con el extremo de 18 años, manteniendo la cabeza sobre los hombros a la hora de tomar decisiones con respecto al gijonés. Un ejemplo se pudo ver este fin de semana. Fueron días de 'calma' para Nico Riestra. 

La semana comenzó para el extremo reforzando a su equipo. El juvenil A de Marcos Landeira volvía a recibir a Nico tras ser 'liberado' por parte de Borja Jiménez. Así evolucionó la semana hasta que el jueves sonó el teléfono. Al término del entrenamiento y de la rueda de prensa previa al viaje a Vitoria, Gaspar Campos y el entrenador mantendrían un aparte en el que acordaron que lo mejor para el estado físico del extremo era el reposo. No viajaba, por tanto, el extremo a Mendizorroza. Ante la baja de un jugador de banda, Borja Jiménez volvió a reclutar a Nico Riestra. Vuelta para arriba. 

Formó el gijonés parte de la expedición que se desplazó a Vitoria para medirse al Mirandés. Era el primer 'viaje' de Nico con los mayores, sin contar el desplazamiento en autobús a Mieres, claro. Apareció como suplente en el partido ante la irrupción de Oscar Cortés y se quedó sin minutos a pesar de ser uno de los futbolistas que calentó en la banda de Mendizorroza. No optó Borja Jiménez por reforzar el juego de banda. Y, de ahí, vuelta a Gijón. 

Ya sabía Nico Riestra que, una vez concluído el partido del primer equipo, su fin de semana se terminaba. Así lo acordaron los técnicos rojiblancos en el momento de su convocatoria, decidida el jueves. Dentro de la cautela que se mantiene con el chico, los horarios tampoco acompañaban. La expedición gijonesa llegó a Mareo a las cuatro de la mañana en la madrugada del sábado. El equipo de Nico, el División de Honor, jugaba a primera hora de la tarde en Mareo. Para prevenir posibles lesiones y asegurar el descanso del extremo, la decisión era que no jugaría con su equipo al regresar de Vitoria. 

Desde fuera, pudo presenciar Nico Riestra la victoria de los suyos gracias al emotivo gol de Tzalo. Con ganas de poder sumar a su equipo dentro del campo, pero con la confianza del que está llevando el camino correcto. Tampoco participaría el domingo con ninguno de los dos filiales. Es la decisión del club. Nico Riestra es jugador del Juvenil A. No es una decisión que moleste. Al contrario.

Desde el club se ve como una medida que permite a todo el mundo mantener los pies en el suelo. Para el futbolista, jugar en el juvenil no es un problema. Viajar con el primer equipo, tampoco. A pesar de eso, no deja de ser un fin de semana sin minutos para una de las noticias positivas que ha brindado Mareo en las últimas semanas.