Y Santander se tiñó de azul: Ambientazo dentro y fuera de El Sardinero
Cerca de 2.000 aficionados del Real Oviedo tomaron este domingo la capital cántabra para animar a los suyos en el partido ante el Racing de Santander
KILLER ASTURIAS / REAL OVIEDO

El Real Oviedo tenía un partidazo por delante este domingo y la afición acudió a la llamada emitida por el equipo. Cerca de 2.000 aficionados oviedistas se desplazaron hasta Santander para seguir el choque de los azules ante el Racing, rival directo por el ascenso a Primera división. Muchos lo hicieron en sus coches particulares y otros en la flota de autobuses que la APARO puso a disposición de la hinchada oviedista.
En torno a las 10 de la mañana, los primeros incondicionales azules empezaban a llegar a la avenida Reina Victoria, junto al Gran Casino Sardinero, el reemplazo al tradicional Cañadío, habitual punto de encuentro cada vez que el Oviedo visitaba El Sardinero. A pocos metros de la arena de la playa, mucho color azul y cánticos para ir calentando motores. A pesar de que la hora era más propicia para el desayuno, la fiesta estaba servida.
A medida que se iba acercando la hora del partido, los decibelios iban en aumento en el búnker oviedista. Minutos antes de la una del mediodía, los dos millares de hinchas del equipo carbayón comenzaron el recorrido hacia el estadio, con un espectacular corteo lleno de camisetas y banderas azules, muy propio de las grandes citas. Al tratarse de un partido de alto riesgo, la comitiva estuvo cercada por los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado.
💙 Las calles de Santander se tiñen de azul
— Killer Asturias (@killer_asturias) May 11, 2025
🔥 Más de 2.000 oviedistas presentes en la capital cántabra para el trascendental duelo de este domingo pic.twitter.com/bph7pqDLb5
Ya una vez dentro de El Sardinero, ruido. Mucho ruido. Si la afición cántabra animaba, la del Oviedo respondía. Primero les tocó celebrar a los azules el gol de Dani Calvo en la primera parte -incluido el alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli, que siguió el partido desde el palco- y después, ya en la segunda, a los racinguistas el de Mario García. Finalmente el partido terminó en empate y ambas aficiones tuvieron que conformarse con un punto. Afortunadamente, no hubo que lamentar incidentes: el buen ambiente reinó en todo momento.
"Tener a nuestra gente cerca siempre nos da mucha energía. Les agradecemos todo el apoyo, ya que siempre están a nuestro lado, sea dónde sea", expresó Sebas Moyano tras el partido. Un agradecimiento que también vino por parte de Dani Calvo, uno de los capitanes. "Hoy los hemos sentido mucho. Notamos que están muy ilusionados y orgullosos del trabajo del equipo. Hoy queríamos brindarles la victoria, pero no ha podido ser. No tengo dudas que la afición seguirá volcada en los partidos que queda", añadió el defensa oscense.