El Oviedo mantiene su fórmula y Bolo cambia la suya
El conjunto azul le ha ofrecido al técnico bilbaíno un año de contrato. Una receta que ha repetido en los últimos años con el resto de entrenadores
Desde que los azules volvieran al fútbol profesional en 2015, el banquillo oviedista ha tenido seis inquilinos diferentes. Una inestabilidad que ha pasado factura en los objetivos marcados por el club carbayón. Y es que el Oviedo no ha conseguido en ninguna de las seis temporadas ya disputadas desde entonces clasificarse para los puestos de play off. La campaña que viene lo volverá a intentar.
Para ello, el club azul firma a Jon Pérez Bolo, un entrenador que ha estado cerca de hacerlo con la Ponferradina en las dos últimas temporadas. Han sido cuatro los años en los que el bilbaíno ha dirigido la nave blanquiazul. Durante esta etapa, el club de El Bierzo ha ido de menos a más de la mano del Bolo. Primero con el ascenso a Segunda División. Luego con la permanencia. Y en esta etapa más reciente a las puertas de la promoción de ascenso.
Un éxito que es casualidad si tenemos en cuenta la apuesta decidida que ha hecho la Ponfe por su entrenador. Su último contrato en El Toralín ha sido de dos años y esa confianza le ha servido para trabajar con más seguridad.
Sin embargo, el Oviedo solo le ha ofrecido un año. Una receta que ha sido una constante con cada uno de los inquilinos que han ido desfilando por el banquillo azul. El bilbaíno, deseoso de dirigir un proyecto más ambicioso deportivamente, ha aceptado esa fórmula que, en caso de conseguir los objetivos, se prorrogaría.