El "presente complejo" (o preocupante) y el "futuro excepcional" del Sporting

Los jugadores rojiblancos están teniendo problemas para encontrar los espacios y, en resumen, interpretar el juego que propone su entrenador 

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Alejandro Irarragorri
Alejandro Irarragorri, presidente del Consejo del Sporting
Dom, 05/02/2023 - 11:14

La derrota del Sporting de Gijón ante el Leganés en Butarque podía estar dentro de lo previsto. Un equipo al alza como el conjunto pepinero, fuerte en su campo y con solo una derrota en los últimos 14 partidos de Liga. Lo que sí causó preocupación fue la inoperancia de los rojiblancos durante los 60 minutos que jugó con un hombre más. 

Al Grupo Orlegi no se le puede negar su convicción y entusiasmo para conseguir las metas fijadas. Se pone de cara ante los problemas, no demora la toma de decisiones y como en cualquier otro ámbito las determinaciones pueden ser buenas, malas o regulares. O incluso la misma decisión es posible que resulte negativa en un primer momento y positiva con el paso del tiempo. A eso se agarra el sportingismo.

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Miguel Ángel Ramírez

 
Y es que el Sporting de Miguel Ángel Ramírez ha nacido desconcertante. Al técnico canario, prácticamente al aterrizar, le han quitado el jugador con mayor proyección de la plantilla, le han traído tres futbolistas poco o nada contrastados y ha aceptado asumir el discurso de cara al público que marca el Grupo Orlegi. Un objetivo, alcanzar la sexta plaza, en el que nadie cree de puertas para dentro. No hay motivos para ello. El Sporting está hoy más lejos del play off que a mediados de enero cuando llegó el nuevo entrenador. 

Precisamente, la destitución de Abelardo y ,sobre todo, la elección de Miguel Ángel Ramírez son las apuestas más arriesgadas del Grupo Orlegi. Alejandro Irarragorri no apreciaba futuro con El Pitu, al que le pesaba para mal la sensación de conformismo sobre el terreno de juego y su sinceridad sin filtros ante los micrófonos de las salas de prensa. A Orlegi, como a tantas otras empresas, no le gusta que sus miembros no compartan la visión establecida. Todo esto tuvo más importancia que la promoción de canteranos que acreditaba Abelardo, lo que en cierta medida indicaba un proyecto. Tampoco tuvo influencia para su continuidad la competitividad que mostró el equipo en la mayor parte de partidos. 

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Ignacio Jeraldino

 
Ahora, tres semanas después, el Sporting juega peor y se comporta confundido con Miguel Ángel Ramírez en el banquillo. Y no necesariamente el técnico es el mayor responsable. La plantilla ha salido debilitada en el último mercado de fichajes, en el vestuario comienza a hablarse de un periodo de adaptación a los nuevos conceptos tácticos y, por tanto, el peaje que eso supone. No en vano, el estilo del entrenador saliente y el del entrante son totalmente distintos. La plantilla no es capaz de interiorizar todo esto en unas cuentas semanas y su iniciativa o lectura sobre el terreno de juego, precisamente ahora con este nuevo método, es en estos momentos más importante que antes. 

Así, y en la línea de actuación del pasado mercado de fichajes, la entidad asturiana parece haber decidido sacrificar esta campaña en beneficio de la próxima. Una determinación que puede ser tan útil en el futuro cercano como peligrosa en el presente inmediato. En definitiva, tenía razón Irarragorri cuando pronunció en repetidas ocasiones lo del "presente complejo y futuro excepcional". Una teoría que mencionó durante sus primeros meses tras tomar el control del conjunto gijonés. La ejecución de esta, vista la dinámica, llama a la preocupación.