El Sporting y sus nuevas gestiones de vestuario
El cuerpo técnico prioriza la aclimatación de los nuevos futbolistas a las necesidades del equipo en este inicio de temporada, algo que tendrá su repercusión en el transcurso del año
Real Sporting
La cautela es la mejor compañera. Algo que se puede extraer de los discursos de Asier Garitano en sala de prensa. El técnico de Bergara sigue manteniendo un tipo de perfil que choca frontalmente con su antecesor en el banquillo. Un discurso mucho más cauteloso y sin grandes alardes. No le hacen falta al entrenador del Sporting de Gijón los grandes titulares para que su mensaje cale en el vestuario. En tres días se cumplirán cinco meses desde su aterrizaje en el banquillo de El Molinón. Y ha cambiado las cosas. Vaya que sí.
Las gestiones dentro del vestuario han asumido la doctrina de Asier Garitano. El técnico del Sporting de Gijón ya ha dejado claro en este inicio de temporada que las prisas no son buenas compañeras. Más en una Segunda división que se puede hacer excesivamente larga para los equipos mal gestionados. De ahí que el vasco priorice determinados aspectos que, en el pasado y fruto de las urgencias, no primaban. El ejemplo está en los dos jugadores que este fin de semana no viajarán al estadio de Riazor.
Mamadou Loum y Oscar Cortés fueron los últimos fichajes del verano en el Sporting de Gijón. Dos futbolistas llegados de fuera de España, pero que se encontraban en ritmo de competición al haber realizado la pretemporada con sus respectivos clubes de origen. Pero, a pesar de encontrarse en un buen estado físico, Garitano activó el freno de mano. Le costó dos semanas entrar a un Loum que ahora estará unas cuantas más en el dique seco. "No sé cuántas, pero se perderá varios partidos", explicaba Garitano. Pero antes de eso, a Loum le tocó ver los dos primeros partidos del curso desde fuera. La aclimatación.
El mismo argumento que ahora utiliza Asier Garitano para dejar con las ganas a un Oscar Cortés alistado para Coruña desde su presentación. "Llego para jugar el sábado, estoy listo", decía el colombiano en sus primeras palabras como rojiblanco. Quieto. Antes, un requisito. El visto bueno de Garitano. El técnico de Bergara analizó durante la semana de trabajo a Cortes y optó por su receta. Cautela.
"Es la primera semana después de venir de Escocia y hay muchos cambios. Preferimos que se quede aquí entrenando, que vaya mejorando su condición y, poco a poco, ir incorporándole al grupo. Está bien (...) Hay que ir viéndolo más días de entreno y que los compañeros le vayan conociendo", decía el técnico del Sporting sobre su último refuerzo. Por el momento, no podrá contar con él en Riazor a pesar de estar en buenas condiciones físicas. Y es que Asier Garitano prioriza otros aspectos que, quizá, antes no se ponían en el foco. Por el momento, la receta le funciona al Sporting. El transcurso de la temporada dictaminará si los pasos son los correctos.