Las cuentas pendientes del Oviedo en el mercado
El club afronta la recta final de la planificación con la mirada puesta en reforzar posiciones clave y dar salida a jugadores con futuro incierto
Real Oviedo

A poco más de una semana para el cierre del mercado, el Real Oviedo ha realizado diez fichajes y aún tiene varios frentes abiertos en la configuración definitiva de su plantilla. Con operaciones avanzadas en algunas posiciones, la dirección deportiva trabaja a contrarreloj para terminar de dar forma a un equipo competitivo en su regreso a Primera División.
El caso de Borja Sánchez es uno de los que marcan la agenda. El canterano, que regresó este verano tras su cesión en el Burgos, podría no tener hueco si finalmente se concretan los refuerzos que maneja el club. Una situación similar vive Oier Luengo, cuyo futuro está condicionado a la posible llegada de otro central en este tramo final de mercado.
Las necesidades en la defensa se mantienen en el foco. El club azul busca un lateral izquierdo que compita con Rahim, una de las demarcaciones más señaladas tras el debut en La Cerámica. En ataque, la llegada de un delantero centro no se considera prioritaria, pero la puerta permanece abierta si surge una oportunidad que mejore lo que ya tiene Paunovic a su disposición.
En el capítulo de salidas, el nombre de Jaime Seoane centra la atención. El centrocampista, con contrato en vigor dentro del Grupo Pachuca, no entra en los planes del técnico serbio y se le busca una solución que resulte beneficiosa para todas las partes.
En definitiva, el mercado del oviedo continúa abierto en varios frentes, con margen de maniobra hasta el 31 de agosto y la convicción de que los últimos movimientos serán determinantes para terminar de equilibrar la plantilla azul.