Los 10 propósitos de Año Nuevo para David Gallego

Con las Campanadas de ayer, se puso fin a un 2021 convulso para David Gallego. El técnico del Sporting pasó de las alturas a estar más fuera que dentro del banquillo rojiblanco. Con la bolsa de oxígeno que supuso la victoria en Ibiza, el técnico de Suria afronta un 2022 repleto de buenos deseos y retos por cumplir. Estos son los propósitos de Año Nuevo de David Gallego:  

1. Calmar las aguas

El final de 2021 estuvo cerca de alejarlo de Gijón. Una mala racha histórica al frente del banquillo sportinguista dejó su continuidad pendiente de un hilo. Un hilo que engordó tras vencer en Can Misses. El técnico busca la tranquilidad tras un final de año que pocos imaginaban. Encadenar una serie de buenos resultados sería suficiente para corroborar la confianza depositada por el Consejo de Administración rojiblanco. 

2. Promoción de ascenso

Cuatro puntos son los que separan al Sporting de la zona de play off de la Segunda división. Una distancia más que salvable con una vuelta entera por delante. Sin pensar en objetivos más ambiciosos, David Gallego debe ser capaz de acercar a su equipo a la zona noble de la tabla antes de llegar a la última jornada. Meterse como último en la promoción no es garantía de nada, pero suele ser una tónica en el equipo que logra el ascenso en las eliminatorias. El Rayo es el mejor ejemplo. A ese camino, debe agarrarse Gallego

3. Fiabilidad defensiva

Su equipo ha perdido en esta primera vuelta su principal arma para mantenerse en promoción durante la campaña pasada. El Sporting adolece la falta de contundencia atrás y la repetición de errores defensivos individuales. Recuperar la solvencia y trasmitir más seguridad en el balón parado son dos de los puntos donde hacer mayor hincapié en el nuevo año rojiblanco. 

4. Víctor Campuzano

Su debilidad y su mayor decepción. Fue una apuesta suya y suya también es la responsabilidad de su mal rendimiento. Apartar de una vez de Campuzano de la enfermería y devolverle al césped es un propósito grabado a fuego en la mente del entrenador. Una vez apartadas las molestias, Gallego debe conseguir recuperar para la causa a ese delantero que le maravilló cuando estaba en el Espanyol. El entrenador lo necesita y el delantero, aún más. 

5. Christian Rivera

No fue su apuesta, pero no le ha sacado el jugo. Durante los ratitos que ha tenido ocasión, Christian Rivera ha demostrado ser un jugador apto para este Sporting. Pero le ha faltado continuidad. Ahí es donde entra en juego el propósito de David Gallego. Sacarle brillo a un futbolista que busca en Gijón recobrar lo que fue en el pasado. A la larga, el beneficio de uno será recíproco para el otro. 

6. Continuidad en los onces

El once de gala de Gallego está en la cabeza de todos. Pese a ello, el catalán solo ha podido alinearlo en una ocasión. Ipurúa fue la única galería donde exponer su obra. Evitar lesiones, apartar el COVID del Sporting y que las internacionalidades, beneficiosas en un sentido pero dolorosas en el otro, hagan el menor daño posible es uno de los principales deseos de Gallego para 2022. Poder tener a sus jugadores disponibles para afrontar una temporada que todavía es larga con la mayor cantidad de piernas disponibles. 

7. Reenganchar a El Molinón

El Templo ya no es lo que fue. La poca afluencia de público al estadio gijonés es uno de los factores que, si estuviera en la mano de Gallego, cambiaría. El catalán, agitador de la masa rojiblanca desde la sala de prensa, espera que 2022 llegue con el regreso de su afición en masa al estadio para brindar ese apoyo al equipo que tanto reclama delante de los micrófonos. Si la pandemia lo permite, Gallego confía en tener a El Molinón de su lado como todavía no lo ha tenido. 

8. Alargar el trago de Copa del Rey

No es el objetivo principal de la temporada, pero a nadie le amarga un dulce. Ante David Gallego se presenta la posibilidad de seguir soñando en el torneo que tantas alegrías brindó al sportinguismo décadas atrás. Para mantener la aspiración, Gallego se marca como propósito torpedear al Submarino Amarillo el día de Reyes en El Molinón. No será una tarea sencilla, pero las bajas de los de Unai Emery invitan al optimismo. No deja de ser un buen propósito. 

9. Seguir con la promoción de canteranos

César García, Santamaría o Alex Oyón son algunos de los canteranos que ya han asomado la cabeza por la puerta con David Gallego de vigía. El técnico catalán buscará seguir con la promoción de futbolistas desde el filial que, en el futuro, generen valor propio en la Escuela de Fútbol de Mareo. A sus órdenes, es habitual ver entrenando a los Jordi Pola, Nacho Martín o Enol Coto, futuros valores en la casa rojiblanca. Falta dar el paso y brindarles la oportunidad grande. 2022 puede ser buen año para ello. 

10. Una victoria en un derbi asturiano

Un empate y dos derrotas es el balance de Gallego desde que el Real Oviedo se cruza en su camino. No deja de ser un partido más de competición, como se harta a decir el propio Gallego cuando el resultando no acompaña, pero la afición anhela el regusto de una victoria ante el eterno rival. Brindarles a sus aficionados un triunfo regional que se les resiste desde 2019. Tres años después, Gallego tratará de conseguir algo que tiene entre ceja y ceja y que, hasta la fecha, no ha podido conseguir. Es el último de los propósitos de un decálogo que David Gallego espera cumplir a rajatabla.