Caer y levantarse: El mantra del Sporting tras las malas caras visitantes

Una especie de Dr. Jekyll y Mr. Hyde está siendo el Sporting de Gijón. Lejos de El Molinón, las versiones más difíciles de reconocer por parte de sus aficionados. Bajo el calor de El Molinón, las propuestas más firmes y, por ende, los mejores resultados. Una bipolaridad rojiblanca que mantiene en vilo a los seguidores, pendientes de saber que cara de la moneda tiene más peso. El Sporting volverá a jugar en casa en un duelo clave por los objetivos finales. Todo después de una dolorosa caída en Lezama. 

Siete veces ha perdido el Sporting en liga en su faceta de visitante. Y siete veces en las que el equipo se ha levantado en El Molinón. Aupado por su público, el conjunto gijonés ha levantado el vuelo después de cada derrota lejos de Gijón. Algo que buscará hacer de nuevo este fin de semana ante el Racing de Santander. Tras las siete derrotas como visitante del equipo de Ramírez, las siguientes visitas a El Molinón se tradujeron en puntos. Cinco victorias y dos empates en partidos complicados. Sabe caer y sabe levantarse el Sporting. El mantra instaurado en el vestuario de Mareo. 

Los dos primeros tropiezos como visitante llegaron a las primeras de cambio. Con un equipo por pulir en varias fases y pendiente de los retoques del mercado, el Sporting cayó derrotado en Valladolid y en Ferrol. Tras el partido en Pucela, los rojiblancos golearon al Mirandés en El Molinón. Después del varapalo de A Malata, el Sporting venció al Burgos en casa con un gol sobre la bocina de Queipo. Acción-reacción. 

La tercera derrota fue ante el próximo rival. En un partido muy disputado, la balanza cayó a favor del Racing de José Alberto. Tras caer con orgullo en El Sardinero, el Sporting consiguió un empate heroico en El Molinón ante el Zaragoza gracias al gol de pillo de Pablo Insua. Mismo empate que se consiguió ante el Levante una semana después de caer ante el Cartagena y tras haber quedado eliminado de la Copa del Rey en Salamanca. Una semana dura cuya herida se cerró. 

Ahora, el Sporting encadena cuatro tropiezos consecutivos. Cuatro derrotas que se han ido intercalando con victorias en casa. Tras caer en La Romareda, victoria revitalizante en el derbi asturiano ante el Oviedo. Tras perder en El Plantío, triunfo frente al Albacete. Y tras caer ante el Levante en el Ciutat de Valencia, los rojiblancos sacaron adelante su partido ante el Alcorcón. 

Con el recuerdo de lo hecho en este curso y con la posibilidad de volver a ganar enteros en la lucha por la promoción afrontará el Sporting su partido de este sábado ante el Racing de Santander. Un partido que, vista la dinámica cántabra y lo apretado del final de temporada, se dibuja de más de tres puntos. Conseguir la victoria significaría birlarle el goal-average al equipo de José Alberto. No será una tarea sencilla. Seguramente, el Racing visite Gijón en su mejor momento de la temporada.