El ascenso a Primera división se pone caro

La Segunda división está considerada una de las ligas más atractivas del fútbol europeo. Una de las razones que apoya esta teoría es lo igualada que se muestra esta competición temporada tras temporada, con independencia de plantillas y presupuestos, lo cual a su vez la hace tan exigente como impredecible.

Para muestra de su dureza es la puntuación que en estos momentos marca el play off de ascenso a Primera división, el objetivo de muchos clubes de Segunda división. Tras 23 jornadas disputadas, es el Real Oviedo el equipo que hace de centinela en las puertas de la promoción. Los azules, con 39 puntos, han alcanzado la cifra más alta para un sexto clasificado a estas alturas de la temporada en comparación a las últimas diez campañas.

Sin ir muy lejos y comparando esta temporada con la anterior, la 2023/2024, el play off estaba cifrado en la jornada 23 en 36 puntos. De hecho, y en vista de que esta campaña el ascenso se pone más caro, era el Sporting de Gijón con 39, los mismos que tiene ahora el Oviedo, el que ocupaba el curso pasado la segunda plaza de la liga, la primera que de acceso al ascenso directo. Esta campaña es el Racing de Santander con 42 puntos el que ocupa ese lugar.

Desde la 2015/2016, la puntuación más alta hasta la fecha para poder disputar el play off ha sido de 38 puntos, concretamente en la campaña 2018/2019. Y la más baja se produjo en la 2016/2017 y la 2019/2020. En ambos cursos la puntuación del último equipo en jugar la promoción de ascenso era de 34 puntos. 

Tal es la exigencia este año en cuanto a puntos que, si tenemos en cuenta la proyección de los azules y el resto de equipos de la zona alta, para disputar el play off en el presente curso habría que sumar 71 puntos. Pero no deja de ser eso: una proyección.