El caso de Rubén Albés con el Sporting no es único
El técnico rojiblanco sobrevive en el banquillo a pesar de haber conseguido solo una victoria en los últimos 15 partidos
LALIGA
El Grupo Orlegi mantiene la confianza en Rubén Albés. También lo hace una parte de la afición rojiblanca, que se agarra a su continuidad con la esperanza de celebrar alegrías el próximo curso. Además, la racha del Sporting de Gijón y la reacción de los gestores no es tan singular como puede parecer. Hay otro equipo en España en una situación similar.
Como Rubén Albés, el técnico Vicente Moreno apenas ha saboreado la victoria con Osasuna en los últimos meses. La racha de su equipo en Liga es idéntica a la del Sporting de Gijón. Una victoria, nueve empates y cinco derrotas en los últimos 15 encuentros de Liga. Eso sí, el caso de Osasuna es en Primera división y a lo largo de esta serie tuvo algún alivio en Copa en forma de triunfo. No puede decir lo mismo el Sporting, que contando dicha competición sumaría una nueva derrota.
Otro factor diferencial es la situación en la tabla o, mejor dicho, la aspiración marcada. Osasuna es decimocuarto; el Sporting, decimosexto y ambos tienen seis puntos de margen. En ese sentido, la directiva del equipo navarro puede decir que de momento está cumpliendo el objetivo de la salvación en Primera. Ni mucho menos había fijado como meta real optar a puestos europeos. Sin embargo, la entidad asturiana y su entrenador unieron sus caminos para aspirar a la zona alta de Segunda y, por tanto, pelear por el ascenso.
‘Pequeñas diferencias’ a un lado, las rachas, las situaciones en la clasificación y la distancia con el descenso relacionan a los dos clubes en la actualidad. También, y de qué forma, la personalidad que proyectan al mantener la confianza en sus entrenadores, desligándose de la línea habitual que se resume en las destituciones tras resultados negativos.
Así, Rubén Albés y Vicente Moreno tendrán una nueva oportunidad esta semana. Será doble para el segundo, con dos partidos consecutivos a domicilio frente al Barcelona y Athletic, mientras que el de Vigo tratará de cambiar el rumbo con un triunfo ante un Huesca que lleva tres derrotas seguidas. Al conjunto rojillo ya le salió bien, o muy bien, al conservar la fe en su entrenador. Mantuvo a Jagoba Arrasate tras 12 partidos sin ganar y dos años después alcanzó la final de Copa del Rey.