El deseo de Rubén Albés que capitanea al Huesca
Miguel Loureiro, objetivo de la dirección deportiva en el pasado mercado de fichajes, es una pieza clave en el esquema de Antonio Hidalgo antes de visitar El Molinón
Ya vela armas el Sporting de Gijón para la cita de este jueves en El Molinón. Otra vez fuera del fn de semana, la afición rojiblanca está citada para vivir una noche que espera sea de bonitas emociones. Tras el tropiezo en Elche y dejar la marca en tres victorias consecutivas, el equipo de Rubén Albés se enfrenta a la aglomeración de partidos. Serán cuatro citas en menos de 10 días. Un atasco en el calendario que abrirá el Huesca de Miguel Loureiro.
Su nombre resonó mucho en las oficinas de Mareo durante el pasado verano. Rubén Albés puso el nombre del defensa gallego sobre la mesa de la dirección deportiva como una de las opciones que mejor encajaba para completar la zaga rojiblanca. La polivalencia de Miguel Loureiro, capaz de actuar en el lateral derecho y en el centro de la defensa, lo convertía en un candidato llamado a elevar el nivel defensivo del Sporting dentro de la reestructuración veraniega. Unas condiciones que gustaban, pero que el Huesca no permitió fructificar.
El equipo oscense elevó su pretensiones. No estaba dispuesto a dejar ir a cualquier precio a un Loureiro que poseía la vitola de jugador capital en El Alcoraz. El Sporting no entró en la puja –también se había interesado el Granada por él– y terminó reforzando su defensa con otras opciones. El gallego se quedó en el Huesca, donde vive su segunda temporada. Empezó con mal pie, con una lesión que le apartó durante un mes. Desde su vuelta ha sido titular indiscutible para Antonio Hidalgo, con cuatro titularidades consecutivas y disputando todos los minutos. Una dinámica que choca con El Molinón.
Miguel Loureiro se 'reencontrará' con Rubén Albés este jueves como una de las principales bazas defensivas del Huesca. Un TOP 3 de la categoría en varios aspectos, como repetía el entrenador gallego en la previa del choque, que pondrá a prueba la fiabilidad de El Molinón. Son tres victorias consecutivas las que acumula el Sporting en casa, cuatro son las que consiguió enlazar el equipo de Ramírez el año pasado. Tras un inicio dubitativo en casa, conseguir un triunfo ante el Huesca reforzaría más si cabe el mensaje de Rubén Albés.
No le da importancia el técnico a la clasificación por el momento. Así se encarga de reafirmarlo en cada rueda de prensa. Aunque no sea algo prioritario, al aficionado siempre le alegra el ojo ver a los suyos arriba. Una victoria mañana del Sporting significaría cerrar la undécima jornada en puestos de promoción de ascenso. La derrota del Castellón y a la del Mirandés, unida a la del Huesca, haría a los asturianos ascender tres puestos más en la tabla. Significativo sería conseguirlo a las puertas de unas semanas apretujadas. El Huesca espera. Con el equipo oscense, un Miguel Loureiro que estuvo cerca de jugar el mismo partido, pero con otra camiseta.