El tope del Sporting de cara a la última jornada de liga
Los rojiblancos podrían escalar hasta la 12ª posición con una victoria en la última jornada ante la Ponferradina
Luis Manso
La historia se repite. Una temporada más, el Sporting de Gijón llegará a la última jornada con los deberes hechos. No obtendrá una buena nota en el cómputo general pero llegará sin apuros al final del curso. Un consuelo menor para otra campaña decepcionante en el seno rojiblanco que terminará con un partido de trámite en términos deportivos pero que tendrá su repercusión en el margen económico de la próxima temporada.
Es un mensaje que también ha trasladado Miguel Ángel Ramírez en sala de prensa. La importancia de las victorias en la recta final, que tendrán su repercusión de cara a la capacidad de movimientos del Sporting de Gijón en este verano. Ascender puestos en la última jornada permitía a la dirección deportiva disponer de un tope salarial más alto de cara al mercado. Una ventana que el Sporting tendrá que utilizar para recomponer una plantilla que sufrirá bajas y cambios en comparación con la actual.
El Sporting cuenta con 50 puntos tras el empate conseguido ayer en Ipurúa. El tope rojiblanco para esta temporada serían los 53 puntos que conseguirían los asturianos en el caso de conseguir un triunfo en el último partido de la temporada ante la Ponferradina. Con ese hipotético triunfo, el Sporting podría escalar puestos en la clasificación que resultarían apetecibles de cara al tope salarial.
En el mejor de los casos, el Sporting podría finalizar la temporada en la 12ª posición. Un salto a nivel clasificatorio que tendría su repercusión. Ascender cinco puestos en la tabla se traduciría en disponer de 250.000 euros extras gracias al reparto económico de los derechos televisivos en la Segunda división. Una suma que daría un rango mayor de libertad al equipo de trabajo de Gerardo García para la confección de la próxima plantilla.
Ese será uno de los motivos a los que se agarrará el Sporting el próximo domingo. Un partido que sufría un cambio de horario, para pasar a jugarse el domingo a las 16:15 horas, con el que los rojiblancos pondrán punto y final a otra temporada para el olvido. Ante la falta de tensión competitiva tras firmar la permanencia, el Sporting buscará cerrar el año con un triunfo importante en el plano clasificatorio. Para ello, tocará romper un registro negativo. Los rojiblancos solo han ganado en uno de los últimos siete finales de temporada.
