Gaspar Campos se apunta al efecto Garitano y a la recta final

Gaspar Campos ya es prácticamente uno más a las órdenes de Asier Garitano. En los últimos días ha podido aumentar la intensidad de su trabajo, aunque quizá todavía sea pronto para que pueda jugar esta jornada. Si no llega a tiempo, al extremo rojiblanco aún le quedarán cinco jornadas para cerrar el curso con un buen sabor de boca.

Tres goles no está tan mal para ser una temporada marcada por las lesiones y sensaciones contradictorias. De momento, sus números son mínimamente inferiores a los de Gelabert con unos 900 minutos de juego menos que los del palentino, o superiores a los de un Nico Serrano que ha sumado 711 minutos por los 1.182 del canterano.

En cualquier caso, el ‘7’ rojiblanco, que esta campaña se ha estrenado como uno de los capitanes, tiene la oportunidad de quitarse el mal sabor de boca. Si se confirma su ausencia este fin de semana, como mínimo tendrá cinco partidos para demostrarse a sí mismo que, a pesar de los obstáculos físicos, sigue por el buen camino.

Prevención de lesiones
Contrariado por las roturas musculares que ha tenido esta temporada, cuando su preparación ha sido impoluta, Gaspar Campos ha valorado la posibilidad de analizar la respiración para prevenir lesiones. Ahora, tras varias semanas recuperándose, ya está prácticamente preparado para regresar al equipo que dirige Asier Garitano. El nuevo técnico tiene mucha confianza en el nivel del extremo, a quien precisamente ya padeció como rival. Gaspar fue decisivo en las dos derrotas que sufrió su Tenerife el curso anterior. 

Junto al entrenador, también el club valora a Gaspar Campos como uno de los jugadores claves de su proyecto. Suya fue la primera renovación de la última generación de canteranos consolidados en el primer equipo. Con contrato hasta el 30 de junio de 2028, el gijonés de 25 años vuelve para la recta final y, sobre todo, para terminar en alto una Liga decepcionante para su equipo y también para él.