La regla del '3-5' para confiar en el Sporting de Gijón
Dentro de la irregularidad rojiblanca en esta temporada, el conjunto rojiblanco ha aprovechado sus cambios positivos de dinámica para enlazar victorias, como quiere hacer este sábado
LaLiga
La Segunda división se ha convertido en una especie de parque de atracciones. Diversión a raudales y sufrimiento para los pocos amantes de las emociones fuertes. En el caso del Sporting de Gijón, no ha conseguido bajarse de la montaña rusa desde su entrada en el parque a mediados de agosto. El curso ha sido un sube y baja constante para los rojiblancos, incapaces de encontrar la regularidad en un trayecto de vértigo en ambas direcciones. Dentro de la locura, una curiosa dinámica.
Ante el Sporting, la regla del '3-5'. Los resultados del conjunto gijonés han deparado una regularidad que invita al optimismo de cara a las dos últimas citas de 2025. Empezó el curso con tres victorias consecutivas para enlazar cinco encuentros consecutivos sin ganar. La llegada de Borja Jiménez se tradujo en otras tres victorias consecutivas, dando paso a cinco partidos más sin ganar de forma seguida.
El triunfo ante la Real Sociedad B parece llamado a reiniciar el bucle. Para repetir la dinámica, al Sporting se le presentan dos encuentros para cerrar 2025 y mantener una curiosa estabilidad dentro de la inestabilidad. A pesar de seguir subido en la montaña rusa de la categoría, el equipo gijonés no se despega de la zona alta de la clasificación. Un triunfo ante el Granada metería a los asturianos en zona de promoción.
Tras cinco partidos sin conseguir la victoria, Borja Jiménez logró frenar la racha del Sporting en Anoeta con un triunfo en el lugar en el que nadie había conseguido hacerlo. La primera vez que ganó también fue un reto de altura. Venció al Racing de Santander en casa, doblegando al actual líder de la categoría. Tras vencer al equipo cántabro, cayeron de forma consecutiva el Valladolid y el Zaragoza. Quiere cambiar los nombres el Sporting por los de Granada y Leganés. Todo ello con el añadido extra de la Copa del Rey, fijada para el próximo martes.
Para volver a activar el bucle, el Sporting debe hacer los deberes en El Molinón. Más de un mes sin ganar en casa lleva el equipo rojiblanco. Precisamente, desde la última visita a la parte positiva de la racha. El triunfo ante el Zaragoza, fechado el 26 de octubre, fue la última ocasión en la que el público rojiblanco se marchó para casa con la alegría del triunfo. Aquel día, también llegaron las lesiones y las sanciones que complicarían el futuro. Para cerrar el año con alegrías, el Sporting se aferra a su dinámica. No es que sea positiva. Es que es la rojiblanca.
