Las notas del Sporting: Varios jugadores se cargan de motivos
Un sobresaliente, muchos notables y una comunión del equipo con el público que aflora las ilusiones del sportinguismo
Las ojeras de este jueves del sportinguismo tienen buena causa. La afición del Sporting de Gijón vive, disfruta y lleva a los suyos en volandas. El conjunto de Miguel Ángel Ramírez volvió a dar motivos para la esperanza tras uno de los mejores partidos del curso. Los rojiblancos sometieron a un Elche llamado por capacidad económica a estar en la zona alta de la tabla. No le importó a los asturianos que sobrepasaron a su rival por juego, empuje y ganas. Tres puntos más para el zurrón y una sensación generalizada de que este equipo es capaz de hacer grandes cosas. En Killer Asturias, analizamos el rendimiento individual de los jugadores del Sporting.
Yáñez (6): Menudo portero tiene el Sporting. Otorga una seguridad en el juego aéreo que le da tranquilidad al equipo cuando el rival asedia. Sin mucho trabajo en el día de ayer, tuvo un error al inicio de la segunda parte del que le libró un fuera de juego. Tiene un saque letal.
Pascanu (8): Empezó el partido con dudas. El Elche le buscó mucho, como hacen el resto de rivales. Tras un doble corte defensivo, renació. Empezó a crecer en defensa y dejó su primer sello de la temporada en ataque con el segundo gol del Sporting. Un tanto de fortuna y fe. El gol le vino ni que pintado para seguir siendo uno de los más sólidos en la defensa. De menos a muchísimo más.
Róber Pier (7): Está a un gran nivel y el equipo lo agradece. No tuvo excesivo trabajo en la primera parte pero sí en la segunda. Tiene una intervención que no saldrá en las repeticiones pero que salva un gol rival tirándose al suelo. Da igual quien juegue a su lado que siempre cumple.
Cali (7): ¿Cuarto central? El argentino demostró en Huesca y también en El Molinón que lo de los roles no va con él. Gran partido del zaguero argentino, soportando las acometidas de los volátiles atacantes del Elche. Asume su capitanía y tira del equipo cuando hace falta. Dibujó la jugada del segundo gol con Gaspar y asistió a Pascanu. Gran noticia.
Pablo García (8): Partidazo, con todas las letras, del lateral del Sporting. En defensa estuvo sensaciones y en ataque fue un puñal. La banda izquierda del ataque rojiblanco fue suya por completo y la exprimió de la mejor manera posible. Una de las notas positivas en el comienzo de la liga sin duda.
Rivera (7): "Si él quiere...", decía Ramírez. Pues ayer quiso. Gran partido del gijonés que fue un no parar de cortar balones y darle velocidad al juego. Se entendió bien con Roque Mesa, variando su posición con el canario. Si es regular en sus actuaciones con el nivel de ayer, el Sporting ganaría un centrocampista de nivel en la categoría. Ojalá que así sea.
Roque Mesa (8): Debe ser más sencillo jugar con el '15' al lado. Llegó a última hora, con el mercado cerrado y parece que llevara jugando en El Molinón toda su larga trayectoria. Recitar del canario en defensa, hinchándose a cortar balones. Tiene la inteligencia que da la veteranía, sabiendo situar el cuerpo cuando el físico ya enciende la reserva. El Molinón se puso en pie para despedirle.
Hassan (8): El público no se arrepintió de trasnochar un miércoles gracias, entre otras cosas, a las virguerías de Hassan. El Sporting tiene un jugador diferente, eléctrico y capaz de modificar el plan rival con una simple arrancada. El Elche le tuvo que atar en corto con Tete, que no pudo atacar. Genera mucho más en ataque y ayer apoyó en defensa.
Gaspar (9): Salió de Huesca con la mosca detrás de la oreja por su error. No le había costado puntos al Sporting pero él es exigente. Sabía que la siguiente sería suya. Dicho y hecho. Tiene el don para estar en el lugar preciso en el momento preciso. Marcó y despachó una noche prácticamente perfecta de fútbol. Le da mucho a la idea de juego de Ramírez. Se merecía una noche así.
Djuka (6): No pudo celebrar con gol su partido 200 como rojiblanco. Y eso que lo intentó de todos los colores. San Román fue su peor enemigo en la noche de ayer en la que el montenegrino no paró de intentarlo. Tiene partidos y partidos. El de ayer, pese a no ver portería, fue un buen partido de Djuka.
Otero (6): Quizá el rojiblanco más desapercibido. Lleva varios partidos sin mostrarse mucho en su rol de delantero. El efecto sorpresa no es tal. Se fajó en las presiones e incomodó mucho la salida de balón rival. De cara a portería rival no tuvo atino.
Los cambios:
Queipo (6): Salió para dar frescura a las bandas. Es un futbolista que siempre genera peligro en el área rival con las defensas cansadas.
Campuzano (6): Aire fresco para el ataque que no se notó apenas por el momento de partido.
Nacho Méndez (6): Algo de descanso le venía bien al '10'. Nada más salir, puso un buen balón arriba que no se materializó.
Guille Rosas (6): Su rol fue de extremo, generando un doble lateral en la banda derecha. Pascanu se lo pone cada vez más difícil.
Varane (SC): Entró con el descuento asomando. Sin tiempo.
El entrenador:
Ramírez (8): Da gusto ver jugar en noches como ayer al Sporting de Ramírez. Su equipo dominó al rival, apretó como nunca y el público disfrutó con los suyos. La propuesta de Ramírez ha calado en el vestuario y todos están enchufados de la mano del entrenador. La inercia no para y el Sporting se cree capaz de todo. Motivos tiene.