Los 5.000 más y un hecho para la historia del fútbol español
El Molinón acogió a 23.319 espectadores en el estreno de la temporada, superando con creces los asistentes al primer partido del año pasado
La jornada inaugural en El Molinón fue la comprobación de que el sportinguismo tenía ganas de fútbol. Terminó la temporada en alto la afición del Sporting de Gijón y el ritmo no se detuvo tras el paso del verano. El chasco de seguir una temporada más en Segunda división no frenó la ilusión de una Mareona que volvió a recibir por todo lo alto al autobús rojiblanco. El calor se trasladó al interior de El Molinón con una entrada de 23.319 espectadores. La comparación es llamativa.
La cifra de asistentes a la jornada 1 fue superior, con creces, al primer partido del Sporting como local en la temporada pasada. La cita ante el Levante congregó a 4.925 espectadores más de los que se dieron cita en el duelo ante el Mirandés con el que se estrenó en casa el curso pasado el equipo de Miguel Ángel Ramírez (18.394). Una ilusión que va de la mano con el éxito de la campaña de abonados. El club alcanza ya los 22.000 socios, superando con creces el registro alcanzado a estas alturas del curso pasado.
El encuentro no tuvo el desenlace deseado por el sportinguismo. El Levante se llevó los tres puntos en un partido en el que el Sporting demostró estar necesitado de piezas en el mercado de fichajes. Una necesidad de futbolistas que quedó demostrada en el primer tiempo. Con el equipo de Albés por debajo en el marcador, el Sporting intentó el empate con un centro lateral que terminó con Andrés Fernández llevándose puesto a Nacho Méndez. El de Luanco se quedó tendido en el césped sin que Guzmán Mansilla detuviera el partido. El Molinón abroncó.
Se levantó como buenamente pudo Nacho Méndez para irse al suelo minutos después. No podía, estaba K.O. El golpe recibido provocó una conmoción en el '10' que le provocaba problemas en la visión y mareos constantes. Convaleciente, se tuvo que retirar al vestuario a pesar de sus intentos de seguir en el campo. Un cambio que no fue uno más.
Es una de las novedades instauradas en el fútbol español este curso. El cambio por conmoción permite a ambos equipos realizar un cambio más, con seis opciones para ambos equipos. En el caso del equipo afectado, en este caso el Sporting, la sustitución del jugador afectado no cuenta como ventana. Es decir, los rojiblancos tenían opción a realizar otros cinco cambios en tres ventanas distintas. No los empleó Rubén Albés, que realizó cuatro sustituciones en su estreno en el banquillo asturiano. Utilizó a los cuatro jugadores del primer equipo que tenía en el banquillo. No hubo opción para la cantera.
El colegiado fue el encargado de comunicar la decisión al banquillo del Levante. También se comunicó por la megafonía del estadio el hecho, inédito en el fútbol español. El Molinón fue el primer estadio español en el que se aplicó este protocolo dentro de las novedades para este curso. Otra estuvo en los calentamientos. Los jugadores del Sporting que estaban preparándose para entrar al partido calentaban en el lado del banquillo local, mientras que los visitantes lo hacían en el sector más habitual. También se amplía este curso el número de jugadores que pueden realizar ejercicios en la banda, hasta cinco a la vez.