Nacho Méndez pierde su lugar

Siempre en cuestión. Está siendo una temporada de subidas y bajadas para Nacho Méndez. El '10' ha vivido momentos de todo tipo durante la temporada que ahora encara su recta final. De jugar tres partidos seguidos como titular a no contar con minutos en tres partidos consecutivos. En el segundo escenario, se encuentra ahora el luanquín. La llegada de José Luis Martí revitalizaba sus opciones de regresar a los onces. Las dos primeras jornadas así lo demostraron. Sustituyó a Pedro Díaz en el descanso frente al Zaragoza y fue titular ante la Real Sociedad B. Pero, desde entonces, el '10', siempre en el banco. 

Es la segunda ocasión de esta índole que vive Nacho Méndez a lo largo de la temporada. David Gallego también le 'condenó' al banquillo en sus últimos tres encuentros. Justo antes, Nacho había sido titular en Valladolid, actuando como mediapunta en detrimento de Villalba, que jugó en la banda zurda. De la titularidad, al banquillo. Gallego no contó con el canterano rojiblanco en los partidos que terminarían dictando sentencia sobre su futuro en el Sporting. El técnico catalán apostó por Nacho al principio de temporada, con dos titularidades para abrir el campeonato. Un plan que no se asentó y que sería relevado en la tercera jornada por la irrupción del dúo Pedro Díaz-José Gragera. 

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En su quinta temporada con el primer equipo, Nacho Méndez busca terminar el año como lo empezó. Volver a contar con oportunidades se ha convertido en una tarea complicada en el Sporting. Su lugar predilecto, la mediapunta, tiene dueño desde el principio de temporada, con Fran Villalba más que asentado por detrás del delantero. En el pivote, donde se le ha visto jugar varios partidos esta temporada, la tarea es todavía mayor. Con cuatro jugadores para dos plazas es el fondo de armario de Martí. Rivera y Gragera para el engranaje defensivo y Pedro Díaz y Nacho para la creación. Con el '8' recuperando sensaciones y fútbol, entrar en su zona es territorio minado. 

Pese a no ser un habitual en los onces, Nacho suma 26 partidos disputados esta temporada, tres más que en la campaña anterior. Además, ya sabe lo que es 'celebrar' un gol. No fue un tanto que pidiera mucha fanfarria–era el gol del honor en la dolorosa goleada en El Toralín–pero es suyo. El primero y, hasta la fecha, único. Con el gol en Ponferrada, también supera su 'no cifra' goleadora de la temporada pasada, donde no vio puerta. Su mejor registro goleador está en la temporada de José Alberto y Djukic con tres tantos. Una cifra que, observando las oportunidades y el rendimiento ofrecido, está lejos de igualarse.