Quentin Braat es la excepción
El guardameta francés es el único de los catorce fichajes, realizados entre el mercado de verano y de invierno, asentado en el once titular
Apenas restan ocho jornadas para que la temporada 2022/2023 eche el pestillo en Segunda División. Una campaña en la que el rendimiento del Real Oviedo ha estado muy por debajo de lo esperado. Los azules, que aún tienen que confirmar su presencia el año que viene en la categoría de plata, no quieren contratiempos en un final de liga descafeinado y sin objetivos ilusionantes al alcance.
Así las cosas, la dirección deportiva del Real Oviedo sigue trabajando en la confección de la plantilla del próximo año, en el mejor de los casos de nuevo en Segunda División. El objetivo no es otro que mejorar las prestaciones de la actual, la cual ha estado representada sobre el césped a lo largo del curso por el grueso de futbolistas que ya continuaban de la temporada anterior. Es decir, ninguna de las catorce incorporaciones producidas durante las ventanas de fichajes de verano e invierno se han asentado en el once azul, a excepción de Quentin Braat.
Y eso que el galo no ha jugado la totalidad de los minutos. Braat irrumpió en el once en la jornada 14, una decisión tomada por Álvaro Cervera a las pocas semanas de su llegada. El francés tomó el relevo de Tomeu Nadal y desde entonces ha sido, con menor o mayor acierto, el guardián de la portería con un total de 20 titularidades.
En la defensa, Lucas Ahijado, Dani Calvo, David Costas y Rodri Tarín han sido una constante jornada tras jornada. También Abel Bretones, en su caso promocionado desde el filial. En el caso de Oier Luengo, su participación ha sido residual, con seis partidos disputados en Liga, los mismo que Carlos Pomares. De hecho, en la retaguardia azul existen dos casos de futbolistas que ya no están en la disciplina carbayona: Alonso Aceves, apuesta de Pachuca, y Miguelón. La falta de oportunidades precipito sendas salidas en el mercado de invierno en la búsqueda de un nuevo futuro. Una ventana invernal en la que llegó Juanfran Moreno, de momento sin titularidades. El partido de este domingo en Las Palmas podría significar su debut en el once, ante la ausencia de Lucas Ahijado por sanción.
En el centro del campo, Ángel Montoro y Koba Lein fueron los futbolistas incorporados por Tito Blanco el pasado verano para liderar la sala de máquinas. Solamente el valenciano ha sido el futbolista que más veces a llamado a la puerta de un doble pivote sustentado por Jimmy y Luismi.
En las bandas, Marcelo Flores y Leo Sequeira, otras dos apuestas del Grupo Pachuca, no han tirado la puerta abajo como se esperaba. El mexicano fue titular en siete partidos, mientras que el argentino, llegado en invierno, tan solo en uno. Sequeira llegó en la misma ventana que Raúl Moro, Camarasa y Manu Vallejo, bajo la dirección de Roberto Suárez. Solo el último, petición expresa de Cervera, encontró por momentos su sitio, aunque en las últimas jornadas se cayó del once.
Así todo, en el ataque azul Sergi Enrich se acerca a una cuota de participación notable. El de Ciudadela, cuyo mayor protagonismo lo alcanzó con Jon Pérez Bolo, atesora un total de quince partidos desde el inicio, lo que le ha servido para sumar tres goles, siendo el segundo máximo artillero del equipo. El delantero balear, que parte con ventaja para suplir a Borja Bastón en las próximas semanas, quiere ganarse la renovación de cara al año que viene.