Quini vuelve a su Molinón: La emotiva inauguración de la estatua del 'Brujo'

No era día de partido en El Molinón. Pero el sportinguismo se dio cita en su estadio. A sus puertas se notaba en el ambiente que era un día especial. El Ayuntamiento de Gijón desveló el reconocimiento a la figura del mayor emblema del Sporting de Gijón. La escultura de Enrique Castro 'Quini' ya luce en la explanada que une El Molinón con el Molino Viejo. Un trabajo de más de dos años realizado por el autor Carlos García que se convertirá en punto de encuentro para el sportinguismo en homenaje a su mayor leyenda. 

En el acto se juntaron muchas personas que conocían bien a Quini. Su familia, con su viuda, sus hijos y nietos, encabezaron un acto en el que no faltó representación institucional. Carmen Moriyón guió a Mari Nieves, esposa del Brujo, al comienzo del acto y estuvo muy cerca de sus familiares, visiblemente emocionados en el momento de descubrir la escultura. Un momento que llegó precedido por el himno del Sporting entonando por las gaitas. Las lágrimas entre los 'Castro' eran complicadas de esconder. 

Tomó la palabra la alcaldesa de Gijón. Carmen Moriyón destacó la figura del 'Brujo' en una deuda pendiente que tenía la ciudad con su mayor embajador. "En el fútbol, ser sportinguista es un privilegio. En la vida, ser de Quini debería ser una obligación", dijo la alcaldesa al término de su intervención. Mari Nieves, cuando tomó la palabra, se dirigió a sus nietos. "Ellos no pudieron disfrutar de Quini como lo disfrutó todo el mundo que lo conoció, ahora vuestro abuelo ya está aquí", dijo. 

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En el acto se dieron cita numerosos excompañeros de Quini. Muchos momentos compartidos en el vestuario del Sporting con Joaquín Alonso, Redondo, Ablanedo, Enzo Ferrero o Jiménez. También tuvieron presencia en el acto José Ángel y Antía, jugadores de las primeras plantillas rojiblancas. Encabezando la expedición rojiblanca, David Guerra que utilizó la figura de Quini "para tomar como ejemplo de lo que debe ser el Sporting". 

También junto a su familia, estuvo presente el Real Oviedo. Martín Peláez y César Martín completaron la representación azul para homenajear a un jugador que no tenía enemigos. "De Quini, independientemente del fútbol, todo el mundo habla bien como persona. Y esas personas hay que venerarlas. El fútbol va más allá de la pelota y para el Oviedo es un lujo estar aquí. No es un homenaje, es algo que se debe a las personas que se lo merecen", dijo Pelaéz. También añadió el presidente sobre la buena relación del Brujo con el club carbayón que "ojalá hubiera jugado en el Oviedo".