Satisfacción y cautela en el sportinguismo con la 'flexibilidad' del derbi
Las medidas presentadas este mediodía por la Delegación de Gobierno responden a algunas de las peticiones trasladadas por las peñas rojiblancas
Queda menos de un mes para que el Principado de Asturias se paralice por la disputa del primer derbi de rivalidad regional de la temporada aunque hoy ya se empieza a percibir las ganas de que llegue el 17 de diciembre. Las novedades ofrecidas por la Delegación de Gobierno acerca del traslado de los aficionados han sido bien acogidas por ambas partes. La palabra "cordura" ha sido una de las más empleadas a través de las redes sociales para valorar la flexibilidad en las nuevas medidas en la llegada de las hinchadas del derbi asturiano.
En función de la nueva normativa, los aficionados con abono en las gradas de animación deberán viajar en autobús. Esto se iguala sin importar quien actúe como local o como visitantes. Los socios registrados en esas zonas del Tartiere o El Molinón estarán obligados a viajar en burbuja hasta el estadio con cacheos previos. El resto de aficionados dispondrán de un punto de encuentro en la ciudad rival donde concentrarse y desplazarse a pie hasta el estadio enemigo escoltados por las fuerzas de seguridad a modo de corteo. Algo mucho más lógico que lo que se vivía en los últimos años en el derbi asturiano.
Esta medida llevaba siendo propuesta por UNIPES durante los últimos años, cuando se trataba de poner solución a los problemas en los traslados. "Parece que algunas de las cosas que propusimos se harán. Pero nos gustaría esperar a ver todos los detalles para emitir una valoración completa, falta ver como va a ser la organización en detalle, para ver como de bien lo vemos", explica Adrián Núñez a Killer Asturias.
En una línea similar, se manifiesta también el presidente de la Federación de Peñas Sportinguistas. Jorge Guerrero, en sus primeros días en su nuevo cargo al frente de Aficiones Unidas, también opta por la satisfacción y la cautela. "Más allá de ser prudentes y conocer bien todas las restricciones que se han levantado, todo lo que sea fomentar el fair-play y poder ver todo lo que veníamos demandando para disfrutar de un derbi asturiano, pues es fantástico. Pero primero queremos tener prudencia y conocer bien las restricciones", cuenta Guerrero.
A falta de conocer más en profundidad como se desarrollará el desplazamiento de los aficionados a finales del mes de diciembre, hay satisfacción en los sectores rojiblancos por la relajación de las medidas de seguridad. El embotellamiento al que estaban obligadas las aficiones de ambos equipos para viajar a una ciudad situada a 27 kilómetros era algo poco concebible. Con lo que se vivía en años pasados, un aficionado del Sporting residente en Oviedo debería viajar hasta Gijón muchas horas antes del partido para regresar al sitio de origen varias horas después del choque y emprender viaje de vuelta a casa. Una incongruencia a la que, ahora, parece ponérsele solución.