Sensatez y cordura: Las nuevas líneas de Mareo que deben corroborarse
La situación de Nico Riestra, con opciones de ser citado de nuevo con el primer equipo del Sporting, abre el debate sobre la gestión de los canteranos en las categorías inferiores
Real Sporting
Es incuestionable que la edad tiene su relevancia en el mundo del fútbol. La veteranía no se compra, se adquiere. Pero para llegar a ciertos niveles son necesarios pasos previos. El fútbol en edades formativas goza de importancia la constancia, el adquirir cada día algo más que el anterior. Todo ello se aúna en los nuevos tiempos para la Escuela de Fútbol de Mareo. La nueva gerencia de la cantera del Sporting de Gijón persigue recuperar el terreno perdido en años anteriores y volver a generar. Pero es necesario la continuidad.
Todo sale a flote a raíz del ilusionante estreno de Nico Riestra. Toca ponerlo en contexto. Citado para su debut con el primer equipo, saltó del banquillo al once inicial en cuestión de minutos ante la lesión de Mamadou Loum. Lejos de arrugarse por los nervios del estreno, el canterano fue una de las notas positivas en el Hermanos Antuña. Atrevido, valiente y con desparpajo. Justo lo que se le pide a un canterano que se estrena con los mayores. Ese encuentro en Mieres, del 29 de octubre, fue la última aparición de Nico Riestra en un partido oficial.
Desde entonces, dos semanas en blanco y una tercera en el horizonte. A no ser que lo evite Borja Jiménez. Las previsiones sitúan a Nico Riestra entre los convocados para recibir al Eibar en El Molinón por parte del Sporting de Gijón. La baja de Pablo García obligaría al entrenador a reconstruir la banda y el juvenil se adapta al perfil que busca el cuerpo técnico. Una citación siempre especial para un jugador de la casa, pero que le apartaría por tercera semana consecutiva de su equipo, del División de Honor. El conjunto de Marcos Landeira jugará este sábado en Pontevedra. Si Nico Riestra es citado a entrenar, puerta cerrada a los minutos fuera del primer equipo.
Es el cambio de política que pone sobre la mesa el Sporting de Gijón con la nueva dirección de Mareo. Al menos, eso parece. Lejos quedan los tiempos en el que un futbolista que se encontraba en edad juvenil mantenía la duda de si participaría con su equipo natural o 'ascendería' con el Sporting C. Se dieron situaciones variopintas el curso pasado –futbolistas que doblaron partidos y convocatorias– que no resultaron productivas. Eso se ha querido cambiar.
El ejemplo está en las convocatorias que han tenido que diseñar en este inicio de temporada Samu Baños y Pablo Pantiga. Contar con menos efectivos de la cuenta fue una costumbre en las primeras jornadas de liga. Lo que el curso pasado hubiera supuesto doble jornada de trabajo para los juveniles, este año se ha querido evitar. Cada uno juega en su equipo. En el caso de Nico Riestra, se lleva al extremo.
"Se está haciendo un muy buen trabajo en el club y se cambiaron cosas respecto a años atrás, según me cuentan, y se está tomando mucho cuidado en esas decisiones. Ha trabajado ayer y hoy con nosotros y ya veremos. Valoraremos y cuando entendamos que pueda participar lo hará y cuando no lo hará con su equipo de origen", decía Borja Jiménez este mediodía con respecto a Nico Riestra y la gestión de los canteranos. Al final, el encargado de dictaminar si Nico Riestra se pasa otro fin de semana sin minutos será el entrenador. Mañana se despejarán algunas dudas. Lo único que se le pide a la nueva gestión de Mareo es que no se haga eso con los canteranos. Evitar mareos.