Un once por definir y una motivación más para Calleja
El técnico del Oviedo tendrá que decidir su alineación en las próximas horas con el objetivo de acabar con el gafe del inicio liguero y vencer en Riazor
En menos de 24 horas el Real Oviedo 24/25 comenzará su andadura en un estadio siempre difícil como es Riazor. Y para ese encuentro ya no habrá probaturas como la semana pasada en el Teresa Herrera. El entrenador carbayón, Javi Calleja, tendrá que apostar por una alineación que sea capaz de acabar con el gafe del debut, y pese a que él parece tenerlo claro, pocas certezas hay de puertas hacia fuera.
Empezando por la portería, una de las posiciones más ‘calientes’ del once titular. Quentin Braat y Aarón Escandell luchan por un puesto. Ambos han rendido a buen nivel durante la pretemporada y vivieron un curso pasado muy complicado sin oportunidades. Una situación que no quieren repetir este año. “Hay mucha competencia. Los dos son grandes porteros, los conocíamos y tenemos buenas referencias. Lo tengo claro, pero hasta mañana no lo sabrá nadie”, admitió Calleja. La principal diferencia entre ambos es el juego de pies, donde Escandell sí parte con ventaja.
En defensa, más de lo mismo. En el centro de la zaga el único fijo parece Dani Calvo, mientras que por el otro puesto pugnarán Oier Luengo y David Costas. El central gallego se perdió los últimos amistosos por unas molestias, pero ya se encuentra en perfectas condiciones y por galones podría ser el elegido. Más dudas hay en los laterales. “Tenemos jugadores con diferentes perfiles, pero cada uno nos da total fiabilidad para que jueguen de inicio”, reconoció. Por sensaciones, Rahim Alhassane ha rendido a un nivel muy alto durante la pretemporada, mientras que en la derecha ni Lucas ni Lemos han destacado por encima del otro durante el verano.
“Si empezamos a hablar del centro del campo ni te cuento…” comentó Calleja poco después de referirse a los laterales. Con las bajas de Colombatto y Seoane, Alberto del Moral parece indiscutible en el once. Junto a él, el técnico ha ido probando a numerosos futbolistas durante el verano. Sibo y Carlos Dotor podrían ser los elegidos, aunque tampoco se puede descartar que Calleja apueste por Álex Cardero, que este curso tendrá dorsal del filial para liberar una ficha.
En ataque, Alemão es el único fijo. Ni su acompañante –podría ser un centrocampista– ni las bandas están claras, aunque parece que Moyano y Paulino parten con ventaja, sobre todo por el escaso tiempo en el club de Hassan, que solo ha trabajado junto a sus compañeros esta semana. “Lleva poco tiempo con nosotros, está en proceso de adaptación y conociendo a sus compañeros. Veremos si sale de inicio o juega en la segunda parte”, afirmó Calleja.
Pero independientemente de los once elegidos en Riazor, el entrenador madrileño tiene claro el estilo de los suyos. “Tenemos que tener la misma identidad y ser un equipo valiente independientemente de dónde juguemos. Quiero un equipo que salga desde el inicio a por la victoria, que trate de robar lo más arriba posible, que tenga personalidad y que contagie ilusión. El Oviedo tiene que ser un equipo con alma”, confesó Calleja.
Todo, con el objetivo de dejar atrás el gafe con el debut liguero. Los azules no vencen en la primera jornada de liga en el fútbol profesional desde 1999, pero Calleja lo afronta con optimismo. “Sé que el Oviedo en esta última etapa en el fútbol profesional no ha conseguido ganar en el debut. Tenemos un reto importante que nos motiva y siempre decimos que las estadísticas están para romperlas”, sentenció el técnico.