La Crónica: Malditos penaltis

El Sporting de Gijón ha caído eliminado ante el Cádiz CF en los octavos de final de la Copa del Rey, en un partido notable del conjunto David Gallego. Los rojiblancos compitieron sin complejos ante un rival de categoría superior, que tuvo que jugarse el pase en la tanda de penaltis tras el empate sin goles en los dos tiempos y en la prórroga.

Con Nacho Méndez por la banda derecha y Christian Rivera en el centro del campo, una alineación muy competitiva la del Sporting. En el otro bando, una formación inicial con jugadores no tan habituales, tres de ellos con ficha del filial.

Empujado por su público, más de 15.000 espectadores en El Molinón, el Sporting se mostró muy competitivo en la primera parte. Sus mejores minutos los tuvo pasado el primer cuarto de hora, cuando en apenas un suspiro tuvo tres ocasiones de gol. Primero, Pedro; después, Kravets, y finalmente un cabezazo de Puma Rodríguez. Tuvo que intervenir el portero David Gil en los dos primeros intentos rojiblancos.

Menos trabajo tuvo Diego Mariño, aunque se llevó un pequeño susto en una jugada por banda derecha del Cádiz que terminó con una volea desviada de Álvaro Jiménez. Nada más del Cádiz en los primeros 45 minutos, en los que el Ortiz Arias no vio un penalti sobre Uros Djurdjevic. Tampoco entró el VAR. 

Sin cambios tras el paso por los vestuarios, al Sporting esta vez no le sentó mal el descanso y dio continuidad a lo que ya había ofrecido en el primer tiempo. Incluso añadiendo algo de profundidad por la banda derecha, con Guille Rosas protagonizando la primera llegada de la segunda parte. Su disparo, tras apertura de Villalba, muy centrado y fácil para David Gil. 

Lo vio claro Sergio González, que de golpe introdujo tres sustituciones y minutos después otros dos cambios, metiendo titulares sobre el terreno de juego. Y se adueñó por completo del balón, lo que no pudo frenar David Gallego con la entrada al campo de Víctor Campuzano. Físicamente estaba mejor el Cádiz, cuando el Sporting despertó en un contragolpe conducido por Puma, que prolongó para Víctor Campuzano, cuyo disparo rechazó David Gil y, en segunda instancia, un defensor. Respiraron los de Gallego, con cuatro saques de esquina consecutivos en la recta final, en la que pudo pasar de todo. Guille Rosas y, sobre todo, Rubén Sobrino pudieron decantar la eliminatoria a favor de los suyos. No evitaron la prórroga. 

Se reanudó el partido con menos ritmo en la primera parte del tiempo extra. Mejor para el Sporting, que mantuvo a los mismos hombres cuando el Cádiz ya llevaba media hora con sus cinco cambios. Solo un cabezazo de Berrocal y poco más en ataque. Quedaba todo pendiente para los últimos 15 minutos, o los penaltis. 

Y Rivera ya no pudo más, tuvo que pedir el cambio. Normal por su falta de actividad y su gran desgaste en el día de hoy. Entró Gragera en su lugar y acto seguido Campuzano tuvo una nueva opción de gol. Su toque con la zurda se fue fuera. Todo a los penaltis, y con Joel Jiménez en la portería local. Sorprendente la decisión de David Gallego, retirando a Mariño en el minuto 120 para el debut de Joel Jiménez. 

Un estreno que no tuvo desenlace feliz. Tampoco hubiese podido hacer otra cosa cualquier otro portero. El Cádiz los tiró muy bien, mientras que Pedro Díaz y Villalba fallaron los dos primeros. Pasó el Cádiz, adiós al sueño copero.