El Alimerka Oviedo gana el duelo directo y sale del descenso
El reestreno de Guillermo Arenas en el banquillo de Pumarín se saldó con una importantísima victoria ante Juaristi Iraurgi (84-78)
El Alimerka Oviedo Baloncesto sumó esta tarde en Pumarín un importante triunfo por conseguir el objetivo de la permanencia ante Juaristi Iraurgi (84-78). Una victoria trabajada y coral en la que han sumado los interiores con Artega a la cabeza (14 puntos), Brown (12) y Martí (11) y en la que Crouch se ha erigido como ese escolta capaz de anotar 17 puntos para sellar la victoria.
Y lo cierto es que 17 fue la máxima de la que gozó el exigido equipo ovetense en el regreso de Guillermo Arenas al banquillo de Pumarín. Corría el tercer cuarto y en los mejores minutos desde hacía muchos partidos, el Alimerka Oviedo se gustó. Anotó afuera y adentro, corrió la pista y limitó al siempre vertical equipo gipuzkoano. Hubo que sufrir, sí, pero el trabajo de los tres primeros cuartos valieron para llegar al último con resuello y festejar. Faltó la guinda del average pero lo más difícil estaba conseguido.
El OCB entró en el partido buscando a sus pívots, tratando de castigar la pintura visitante y buscando imprimir su ritmo de partido. Sin embargo, Juaristi reaccionó gracias a su mejor hombre, Hoover, que solo en los primeros diez minutos ya había logrado 11 puntos. Además, los guipuzcoanos anotaron 5 triples por solo 2 locales consiguiendo pequeñas rentas a lo largo del parcial. Tuvo que ser Marc Martí, sobre la bocina y más allá de la línea quien empatara el cuarto 25-25.
En el segundo, un parcial 2-7 de salida de los visitantes no gustó a Guillermo Arenas que pidió tiempo muerto con apenas dos minutos consumidos. Un triple de Romeo y la mejora de las prestaciones defensivas devolvieron al partido a los locales, 34-34 tras canasta de Thorir y 4:45 para el descanso.
Más, un 6-0 de parcial con Arteaga de protagonista anotando y reboteando recuperó la ventaja local, 40-37, a falta de dos minutos de cuarto. El Alimerka Oviedo corría y Pumarín agradeció el esfuerzo de su equipo que, gracias a dos triples consecutivos de Thorir y Brown se fue al receso mandando siete arriba, 49-42.
Mucho del partido pasaba por el tercer cuarto. Por cómo se iban a comportar ambos conjuntos en un contexto de presión. Y el Alimerka OCB respondió. Una canasta de Romeo y un triple de Pruitt colocaron la máxima nada más comenzar. 54-42. Un acierto que había aparecido a cuentagotas y que siguió desde el 6,75 con el propio Pruitt y Crouch hasta el 63-50 a falta de 3:40 para el final del cuarto. Sin concesiones, los postes también jugaron su papel y Arteaga y Brown colocaron la máxima, 67-50, y se multiplicaron bajo el tablero para limitar el buen hacer de Juaristi en el rebote ofensivo.
Al último cuarto el Alimerka Oviedo también entró mandando. Con la holgura de los 14 puntos de ventaja amasados y con la con la confianza de que hoy era el día. Más espesos en ataque, eso sí, Santana mandó parar para alimentar a sus postes, Martí y Brown. Un triple de Chuso y un contraataque de Crouch a falta de 4:32 colocaban el 78-62 y Juaristi solicitaba tiempo muerto.
Después el partido se paró. Un 6-0 de parcial de Juaristi y las imprecisiones tanto en ataque como en defensa obligaron a Arenas a solicitar tiempo parar disputar los dos últimos minutos con las ideas más claras. La victoria estaba en juego, sí; pero también el average tras la derrota en la ida por 9 puntos.
Pero no todo iba a ser fácil. La presión de Juaristi facilitó un robo y tres tiros para Hoover y de nuevo los gipuzkoanos anotaban para colocarse a seis, 80-74 con minuto y medio en el reloj. Arteaga fue a la línea y no falló para superar el último escollo. Con este triunfo, el Alimerka Oviedo respira en Pumarín y saca la cabeza de la zona de descenso. El próximo compromiso, la visita el viernes 10 a la cancha de ICG Força Lleida.