El Oviedo se centra ahora en su objetivo más complejo en el mercado

"Queremos hacer dos incorporaciones más. Tenemos posibilidad para hacerlo". Así de categórico se mostró ayer Agustín Lleida durante la presentación de Jonathan Dubasin cuando fue preguntado por la actualidad del mercado azul. El director general del Real Oviedo, persona clave en la confección de la plantilla carbayona junto a Roberto Suárez, tiene ante sí el reto de mejorar las prestaciones del plantel de Luis Carrión de cara a la segunda vuelta.

Una vez concretada la llegada de Jonathan Dubasin, la dirección deportiva del Real Oviedo se marca dos objetivos más: la incorporación de Borja Sánchez y el fichaje de un central. La primera operación está cerca de concretarse, a falta de unos últimos flecos administrativos que el canterano está resolviendo en México. El segundo de los propósitos tiene aún más tela que cortar, si bien puede ser esta la tarea más compleja de aquí al 31 de enero.

Por varios asuntos. El principal, porque la plantilla del Real Oviedo cuenta con una de las mejores parejas de centrales de Segunda División. David Costas y Dani Calvo han demostrado en esta primera vuelta entenderse a la perfección y prueba de su gran complicidad es el bagaje defensivo del equipo de Luis Carrión: el Oviedo es el segundo equipo que menos goles encaja. Aunque ahora David Costas esté lesionado, una vez se recupere, el gallego volverá a liderar el centro de la zaga oviedista.

Por esta razón, el futbolista que desee aterrizar en el Carlos Tartiere para la segunda vuelta debe tener en cuenta la dura batalla a la que se va enfrentar por ganarse un hueco en el once. Y no solo con Costas y Calvo, también con Oier Luengo. El central vasco, requerido durante buena parte de la primera vuelta tanto en la banda derecha, principalmente, como en el centro de la zaga, ha rendido a buen nivel en cada una de las ocasiones en las que ha participado.

Por tanto, no es el rendimiento de los futbolistas del Real Oviedo lo que precipita la búsqueda, sino las lesiones que han ido condicionando las convocatorias semana tras semana. "Si no tuviéramos las bajas, no buscaríamos nada en defensa. Las lesiones nos hacen pensar que podemos estar cortos. Si aparece un central o un central que también pueda jugar de pivote, lo incorporamos. Pero no traer por traer", expresó Agustín Lleida.

Eso sí, en el caso de que la dirección deportiva del Real Oviedo convenza a un futbolista para venir, este podría tener la oportunidad a las primeras de cambio en el primer partido del año ante el Amorebieta. Para este encuentro, Carrión solamente tiene disponible a Carlos Pomares como el único defensa de la primera plantilla. De no llegar, y si al técnico catalán no se le ocurre otro plan con algún central procedente del Vetusta, como Jaime Vázquez, Pomares tendrá que volver a desempeñarse en el centro de la zaga junto a Luismi, recuperado ya de su lesión muscular, tal y como hicieron por circunstancias ante el Espanyol, aunque sin coincidir ambos sobre el verde.