Cuatro apuestas que aún se mantienen

La derrota ante el Tenerife de hace un mes fue un antes y un después en el esquema de Luis Carrión. Después de dos tropiezos consecutivos - una semana antes los azules habían caído frente al Cartagena -, el entrenador del Real Oviedo decidió agitar el árbol en busca de soluciones. Una vez más, las encontró.

Carrión apostó por dar descanso a varios de sus jugadores más utilizados. Por un lado, la banda izquierda sufrió una revolución, si bien el técnico catalán sentó a Bretones, el futbolista de campo con más minutos en el Oviedo, y a Sebas Moyano, otro de los más utilizados. En su defecto entraron dos efectivos que aún no han perdido el trono: Carlos Pomares y Borja Sánchez.

Tanto el lateral valenciano como el atacante ovetense se agarraron a titularidad en el primer partido ante el Huesca y no la soltaron hasta la fecha, con tres partidos consecutivos formando de la partida. En aquel partido en El Alcoraz, tanto uno como el otro fueron importantes en la victoria ante el conjunto oscense: Pomares firmó un pase de gol y Borja selló el tanto de la tranquilidad para los carbayones. Ante el Zaragoza y frente al Espanyol, Luis Carrión mantuvo su apuesta.

El otro futbolista que volvió al once inicial en Huesca y que de momento no se ha caído es Masca. El portugués, con cuatro goles en su haber esta temporada, también se ha ganado la confianza de Carrión. Primero, formando pareja con Alemão en la doble punta. Y después, ante el Espanyol, caído a la banda derecha debido a la vuelta al 4-2-3-1. 

Otros de los beneficiados en la mudanza del dibujo fue Jaime Seoane. El madrileño, que a diferencia de los anteriores sí venía siendo titular, retrasó su posición más habitual, donde luce más sus prestaciones en el doble pivote. Después de tres jornadas rindiendo a un gran nivel, su presencia al lado de Colombatto parece incuestionable.