La tarea pendiente que frena el impulso azul

Es pronto para sacar conclusiones, pero lo visto hasta el momento no inspira buenos presagios para la afición del Real Oviedo. El equipo carbayón ocupa puestos de descenso y es, por ahora, el único conjunto, junto al Huesca de José Ángel Ziganda, al que se le resiste la victoria en estas primera cinco jornadas ligueras.

La explicación a la ausencia de triunfos se encuentra, precisamente, en el escaso rendimiento ofensivo de los azules. Junto al equipo oscense, son los dos conjuntos que menos goles han marcado hasta la fecha, con dos tantos en su haber cada uno. Unos registros que los azules deberán impulsar cuanto antes para sumar de tres y salir de los puestos de peligro.

El dato de los dos goles es curioso, sobre todo, si lo comparamos con el ritmo goleador de los carbayones a estas alturas en campañas anteriores. Desde que el Real Oviedo ascendió al fútbol profesional en 2015, nunca había tenido un registro tan bajo en su casillero de goles a favor. Lejos quedan los ocho goles que el equipo oviedistas había marcado a estas alturas del campeonato en las temporadas 2017/2018 y 2018/2019.

Lo más cerca del dato del presente año lo encontramos el curso pasado, con Jon Pérez Bolo en el banquillo, con tres tantos en su casillero. Los mismos que en la campaña 2020/2021, con Sergio Egea a los mandos, y en la 2016/2017 bajo las órdenes de Fernando Hierro.

Precisamente, la ausencia de goles se explica si tenemos en cuenta las escasas oportunidades de peligro que ha generado el cuadro oviedista en la portería rival. El Real Oviedo es, de hecho, el equipo que menos disparos ha realizado, con ocho lanzamientos entre los tres palos en cinco primeras jornadas. El que más veces ha probado suerte ha sido Sebas Moyano, con dos intentos. Borja Bastón, por su parte, es hasta el momento el futbolista que más ha aportado en el aspecto ofensivo, con un gol y una asistencia.

Ahora, tras dejar la portería a cero en el duelo ante el Sporting de Gijón, Álvaro Cervera se centrará en producir más peligro en área rival. El año pasado el equipo azul destacó por su efectividad en la portería contraria, un aspecto que de momento se le resiste al cuadro carbayón. Potencial en la plantilla hay, y experiencia en el banquillo para encontrar soluciones, también.