Marcelino sigue acumulando grandes noches

El entrenador de Careñes suma otro capítulo a su trayectoria tras plantarse en unas nuevas semifinales de Copa del Rey

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Marcelino
Marcelino realiza indicaciones desde la banda
Vie, 04/02/2022 - 16:19

El idilio de San Mamés con Marcelino García Toral suma y sigue. El Athletic de Bilbao se plantó de nuevo en unas semifinales de la Copa del Rey tras doblegar al líder de Primera división. El Real Madrid fue incapaz de doblegar al cuadro de un técnico que ha calado en la filosofía bilbaína. El entrenador asturiano continúa acumulando capítulos heroicos de la mano de los rojiblancos. Ayer, San Mamés a soñar con levantar otro título de la mano de 'Marce', un entrenador que, desde que emigró de Mareo, no ha parado de acumular noches como la de ayer. 

Tras quedarse muy cerca del ascenso en el conjunto rojiblanco, las mieles de la Primera división le esperaban en el sur. En su primera etapa en el Recreativo, el de Careñes lograba su primer éxito: un ascenso a la máxima categoría de la mano del Decano. De Huelva a Santander para seguir triunfando. A la orilla de la playa del Sardinero, Marcelino logró hacer historia y clasificar al conjunto verdiblanco por primera ocasión para la UEFA. Marcelino es una de los grandes figuras en las entrañas del estadio racinguista. 

De histórico a histórico, Marcelino fue reclutado para devolver al Real Zaragoza a una categoría perdida el año anterior. Llegar y besar el santo. Un ascenso, el segundo para el asturiano, que poca paciencia le concedió. Marcelino salía de La Romareda y, tras dos pasos infructuosos por Santander y Sevilla, aterrizaba en la Comunidad Valenciana. Con el Villarreal sumó su tercer ascenso para asentar al cuadro amarillo en una élite de la que aún no se ha bajado. Llegó incluso a semifinales de la Europa League con el 'submarino amarillo'. Marcelino se consagraba como uno de los mejores entrenadores del fútbol español y las puertas de otro grande se le abrían. 

El de Careñes aterrizaba en un histórico en horas bajas como era el Valencia. En su segundo año en Mestalla, tras muy buenas actuaciones ligueras, logró levantar la Copa del Rey. El primer título para el conjunto ché después de mucho tiempo llegaba con Marcelino tumbando al Barcelona. Un héroe para el valencianismo que no encontró el amparo de los dueños de la propiedad. Marcelino se iba de la capital del Turia para embarcarse en una aventura que le devolvería al norte. El Athletic de Bilbao acogía al asturiano con los brazos abiertos y Marcelino respondía.

En su primera temporada, una Supercopa de España y la final de la Copa del Rey. En la segunda, el de Careñes ya está en la antesala de otra final tras dejar por el camino a Barcelona y Madrid. En una plaza de las grandes como es San Mamés, Marcelino ha encontrado un sitio en el que ha conectado con su equipo y su público. Una afición devota de Marcelino y de todo lo que ha conseguido. La de ayer es una noche más para el recuerdo en la trayectoria de un técnico que, desde que abandonó el Sporting, no ha parado de acumular triunfos.