Pachuca está de aniversario: El repaso a su primer año en Oviedo 

Hoy, 12 de julio, se cumplen 365 días del desembarco del conglomerado mexicano en Asturias

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Jesús Martínez
Jesús Martínez, en el ayuntamiento de Oviedo.
Mié, 12/07/2023 - 09:00

El tiempo, ese elemento fugaz que en algunas ocasiones puede convertirse en eterno. Ya lo decía esta semana el propio Martín Peláez: “A veces ha pasado muy lento y a veces muy rápido. Nos han pasado una infinidad de cosas que parece que son muchos años aquí”, aseguró el dirigente azteca. Pero lo cierto es que estos primeros 365 días del Grupo Pachuca a los mandos del Real Oviedo han pasado volando. Y a pesar de haber cometido errores, el balance de las actuaciones del conglomerado mexicano es claramente positivo. 

Pero, ¿por qué? Para empezar, el Oviedo vive un periodo de tranquilidad en todas las áreas. Un hecho que, a pesar de que debería ser lo habitual, no suele suceder en el club azul. El entrenador renovado desde hace semanas hasta 2025, el director deportivo trabaja en la confección de la plantilla desde hace meses y la directiva echa un cable con todo lo que puede. Nada que ver con el curso pasado, cuando en junio no había ninguna de estos elementos. Este curso, todos trabajan en sintonía y con las ideas muy claras, un factor muy importante en cualquier ámbito, sobre todo en el de los fichajes. 

El club se está moviendo rápido y bien en el mercado, aunque eso no garantiza nada a la hora de la verdad si la ‘pelotita’ no acaba entrando. Aún así, es significativo que apenas haya habido culebrones este verano, al menos por ahora. La sensación es que otros años la situación del propio Cervera o de Víctor Camarasa se hubiese alargado. Pero el Grupo tiene claro que no quiere repetir situaciones como la de Borja Sánchez el año pasado, que acaban quemando y desgastando más de la cuenta, y los dos se comprometieron a principios de junio. 

En su primer verano completo al frente de la entidad se han notado los cambios. La agilidad con la que llevan a cabo todas las operaciones es la principal diferencia con respecto a Carso. En junio ya estaba presentada la campaña de abonados y la primera equipación. Y en una plaza como Oviedo, en la que la afición nunca decepciona, los resultados no han tardado en llegar. En apenas tres semanas, el club acumula más de 17.000 socios, con todavía algo más de un mes para el inicio liguero. 

No solo eso, sino que prometieron mejoras en el Carlos Tartiere y se están llevando a cabo. Los nuevos altavoces están en proceso, la iluminación ya no dará más problemas, habrá U televisiva y los nuevos videomarcadores avanzan a buen ritmo (uno de ellos ya está instalado). Poco a poco, el Tartiere se va modernizando y poniéndose al nivel de los mejores estadios del fútbol español. 

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Real Oviedo

 
En líneas generales, la llegada del Grupo Pachuca ha sido muy positiva para la entidad, lo que no quita que también hayan cometido errores. Su implicación en los fichajes del club ha sido evidente –algo que se echó de menos con Carso–, pero han dejado luces y sombras. El verano pasado apostaron por jóvenes promesas y no acertaron. Ni Alonso Aceves ni Marcelo Flores rindieron al nivel esperado, aunque sirvieron a la entidad para darse cuenta de las cosas que no podían repetir. “Es fútbol pero es una liga diferente, una idiosincrasia diferente, una forma de gestionar diferente… Hemos hecho una maestría de un año todo el grupo, Jesús y yo, aprendiendo a cómo manejar la situación", reconocía Peláez. 

Lo cierto es que esos errores que cometieron, desvelan una virtud ‘oculta’. Equivocarse y rectificar es el primer paso para hacer las cosas mejor. Y parece que han aprendido la lección. Desde entonces, apuestan por jugadores contrastados y que destacan en el país azteca, como el caso de Romario Ibarra o de Santiago Colombatto, el principal deseo para la medular. 

La principal duda hasta la fecha que se le puede poner a Pachuca es el asunto de la nueva ciudad deportiva, ubicada en Latores. El gran proyecto que inició la entidad aún no se ha puesto en marcha, a pesar de que los terrenos fueron anunciados el pasado mes de marzo. El problema reside en la autorización de los planos urbanísticos, aunque tal y como anunció Peláez en junio, desde la entidad esperan contar con todos los permisos entre este mes y agosto. Eso sí, por ahora no hay novedades. 

En resumen, parece que la llegada de Jesús Martínez y compañía ha sentado bien al club. Han demostrado personalidad en los momentos más débiles (cese de Tito y Bolo cuando el rumbo no era el correcto) y se han dejado aconsejar por gente como Álvaro Cervera, que sabe de qué va el asunto. Y gracias a toda la experiencia que han ido adquiriendo a lo largo de este año, irán a mejor. Dar continuidad y estabilidad al proyecto es el primer paso, casi indispensable, si el objetivo es cosechar algún éxito en un futuro próximo. Sin embargo, todos sabemos cómo es el mundo del fútbol. Y todo el trabajo realizado quedará en balde si los resultados deportivos no son los esperados.