El Alimerka Oviedo comienza el despegue
Los de Trifón Poch suman su segunda victoria consecutiva del curso tras vencer a Melilla por 67-70 en un encuentro que se decidió en los últimos segundos
Lo que parecía un pozo sin fondo para el Alimerka Oviedo Baloncesto, ahora el club de Pumarín ya empieza a otear la superficie. Todo ello gracias a la victoria que sumó anoche en Melilla por 67-70, su segundo triunfo consecutivo del curso.
Los de Trifón Poch saltaron muy imprecisos al Javier Imbroda. Sin embargo, el primer parcial de 1-6 tenía sello carbayón. Melilla no se dejó ir y le dio la vuelta al marcador (11-10). Los locales iban consiguiendo pequeñas rentas que fueron prologando durante los primeros dos cuartos.
Aún así, los ovetenses aguantaron el tipo, y neutralizaban cualquier intento de despegue del cuadro melillense. Thorir, Peñarroya y Oliver Arteaga fueron los más destacados durante la primera parte. Al descanso, 37-36.
Tras el paso por vestuarios, Peñarroya salió en modo jugón y empezó a hacer diabluras por la pista. Prueba de ello fue un 2-12 de parcial para los ovetenses. Gracias también a transiciones rápidas de Crouch. Pero Melilla no se vino abajo y apretó en los últimos minutos del tercer acto, que se cerró con 48-54.
Melilla encadenó un parcial 7-0 al final del último acto y se puso por delante 55-54. Tras tres minutos sin anotar el OCB tuvo que recurrir de nuevo a Oliver para que el capitán recondujera el rumbo. A arreones, como en el primer cuarto, y dubitativos ambos equipos cada uno con sus falencias emergió entonces la figura de Chuso González para ir a por el aro rival. 5 minutos por jugar y el OCB ganaba por uno 59-60.
Los últimos minutos fueron de mucha emoción, y también de sufrimiento, pero con final feliz. Gracias, especialmente, a un gran Oliver Arteaga y Romeo Crouch. La próxima cita será el próximo martes, 6 de diciembre a las 19:30 horas, en Pumarín ante el Real Valladolid.