A Bolo se le agota el crédito

Cuatro empates y tres derrotas en el último mes y medio de competición no es balance adecuado para un equipo con aspiraciones. Ni tampoco rozar los puestos de descenso. Así lo entiende la afición del Real Oviedo, que esta tarde despidió a la plantilla y al entrenador con una sonora bronca tras la derrota de los azules ante el Huesca (0-1).

"Nuestro público tiene derecho a protestar si no le gusta lo que ve", ha expresado el técnico azul, Jon Pérez Bolo, en una rueda de prensa en la que lejos de proteger a sus futbolistas, apuntó hacia ellos de manera crítica. Un síntoma nada esperanzador teniendo en cuenta el contexto actual. Una situación en la que el entrenador sabe que su credibilidad como inquilino del banquillo del Carlos Tartiere se le agota tras los malos resultados. Y también, por su incapacidad para mejorar el rendimiento del equipo.

No parece que desde la dirección del club se vayan a tomar decisiones drásticas en las próximas horas. El Oviedo disputará su próximo partido en poco menos de tres días, tiempo escaso para encontrar un entrenador de garantías que tome las riendas del equipo y reconduzca la situación. Esta circunstancia beneficia a Jon Pérez Bolo que, al menos hasta el sábado, seguirá siendo entrenador del Oviedo. Los azules se enfrentarán ese día, a partir de las 21 horas, al Albacete.

Lo que sí está claro es que, en el Carlos Belmonte, Bolo tendrá que salvar la primera bola de partido en su contra. Si el vasco no consigue la victoria, el próximo partido en el Carlos Tartiere podría volverse insostenible desde el inicio. Un riesgo inasumible para el club que ya dibuja todos los escenarios posibles.

Así todo, el técnico vasco prefiere abstraerse de todo lo que le rodea, aunque es consciente del momento delicado que vive como entrenador azul. "No pierdo ni la más mínima energía en pensar en lo que me puede pasar a mí. Esa decisión no la tomo yo. Voy a seguir trabajando. El fútbol da muchas vueltas, solo creo en trabajar y en mirar hacia adelante", ha manifestado esta tarde un entrenador al que se le agota su crédito y que si no reconduce inminentemente la situación, su futuro estará lejos del Carlos Tartiere.