El Oviedo echa la vista atrás: Un espejo en el que reflejarse y más motivos para la esperanza

No es habitual que un equipo que comienza la temporada en descenso pueda acabar el curso entre los seis primeros clasificados. Pero el Real Oviedo y el Girona (temporada 21/22) lo consiguieron. Con algunas similitudes y también con ciertas diferencias, el equipo de Michel dejó fuera al cuadro carbayón empatando a 68 puntos y en el play off consiguió el ascenso. Un camino que quiere repetir el Real Oviedo de Luis Carrión dos temporadas después. 

El catalán se hizo cargo del Oviedo cuando vagaba por la penúltima plaza y tras superar la jornada 7, el equipo tan solo tenía tres puntos en su casillero. Una situación que ha conseguido remontar con 61 puntos en 36 jornadas, unos números que le sitúan como el cuarto mejor equipo de toda la Segunda División desde su llegada. 

Por su parte, el Girona confió en Michel desde el principio y hasta la jornada 10, con apenas ocho puntos, estaba en puestos de descenso. Fue la última vez que el equipo catalán pisó la zona roja. Desde mediados de octubre comenzaron una racha de resultados brillante que les permitió depender de sí mismos en la última jornada. Y ante el Burgos sumaron un punto que condenó al Oviedo y a ellos les sirvió para acabar en la sexta plaza. 

Y en el play off hicieron efectiva ‘la ley del sexto’. Desde que se implantó este sistema de play off en la temporada 2010/2011, el sexto ha conseguido el ascenso hasta en cinco ocasiones.  Y en la promoción también se enfrentó en semifinales al Eibar, venciendo en el global (1-2) y consiguiendo el ascenso en la final ante un Tenerife (1-3) en el que jugaba Carlos Pomares. Ahora el Oviedo quiere repetir la fórmula y este sábado tiene la primera piedra en el camino: un Eibar que afronta su tercer play off consecutivo y que acumula mucha experiencia en estas eliminatorias.