El Real Oviedo no tiene plan alternativo

Desde la llegada de Cervera pierden la posesión en todos los encuentros, pero no son capaces de tener más el balón cuando van por detrás en el marcador

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Manu Vallejo presionado por dos rivales del Burgos.
Manu Vallejo presionado por dos rivales del Burgos en el Carlos Tartiere.
Dom, 19/02/2023 - 21:28

El Real Oviedo tiene muy claro su plan: Dejar la portería a cero y tratar de maximizar las pocas llegadas en ataque. Puede que no sea la propuesta más atractiva pero, si el resultado favorece, nadie se quejará. La prueba fue que cuando los números acompañaban, apenas se escuchaban entre los aficionados quejas por el estilo de juego.

Sería muy oportunista aprovechar la peor racha del técnico desde que asumió las riendas del club, para atizar su método. Entre otras cosas, porque supondría ignorar que el club se encontraba en posiciones de descenso durante el mes de octubre y parte de noviembre. Sin embargo, sí se debe exigir que haya un plan alternativo.

En el momento que el Real Oviedo recibe el primer gol prácticamente el partido se puede dar por concluido. Prueba de ello, es que la última remontada fue ante un ya descendido Alcorcón en abril de la temporada pasada. En cualquier caso, más allá de los resultados, hay que profundizar en los motivos. Cuando el equipo está por detrás en el marcador, apenas es capaz de mandar en los partidos. De hecho, su posesión apenas aumenta. Para un equipo al que le cuesta superar el 30%, es un claro inconveniente.

El Cartagena se adelantó en los primeros compases del encuentro. Los murcianos terminaron la primera entrega con el 70% de la posesión. En la segunda mitad, los locales se echaron más atrás y dieron metros a los azules que, pese a todo, también tuvieron menos tiempo el balón.

Ante el Burgos Club de Fútbol, es cierto que con uno menos, tampoco fueron capaces de mandar en el juego. Los castellanoleoneses se sienten cómodos divorciados del balón, pero tampoco los asturianos consiguieron tener más posesión que su rival.  Desde el tanto en contra, solo tuvieron el 46%. Solo ante el filial del Villarreal en la segunda parte lograron tener más el cuero que su adversario. Ahora  bien, el gol lo reciben en el minuto 7 y al descanso se llega con solo el 35% de la posesión. 

Frente al Andorra, los datos son humillantes. Es cierto que los de Eder Sarabia apuestan por un estilo vistoso que implica ser dueño del encuentro. No obstante, se adelantaron en el minuto 20 y los carbayones no fueron capaces de superar el 27% en ningún tramo del encuentro. En las otras tres derrotas, tampoco se consiguió cambiar el guion.