Image
CABAL

Eric Bailly, un debut para la esperanza

El defensa costamarfileño se estrenó ante el Barça con un partido completo, personalidad en los duelos y dejando pinceladas de lo que puede aportar al centro de la zaga azul

Imagen
Bailly
Vie, 26/09/2025 - 18:00

El estreno de Eric Bailly con el Real Oviedo no pudo tener un escenario más exigente: el FC Barcelona en el Carlos Tartiere. El central costamarfileño disputó los 90 minutos completos en su debut oficial con la camiseta azul y dejó una grata impresión en la afición, que vio en él a un defensa con jerarquía, valentía y una personalidad capaz de sostener al equipo en noches grandes.

Desde los primeros compases, Bailly mostró lo que puede aportar. Firme en los duelos, rápido al cruce y seguro en la salida de balón, el ex del Manchester United y Villarreal, entre otros, aportó calma en la zaga junto a Carmo. Su actuación transmitió la sensación de que, pese a llevar apenas unas semanas con el grupo, es un futbolista preparado para asumir responsabilidades desde el primer día.

En el segundo tiempo, protagonizó una de las imágenes del partido al ver la cartulina amarilla tras un salto con Robert Lewandowski, en el que golpeó con el codo al delantero polaco. Más allá de la sanción, la acción reflejó su intensidad competitiva y su carácter, dejando claro que no rehúye el contacto ni los duelos con delanteros de talla mundial.

Con el paso de los minutos, acusó la falta de ritmo tras su inactividad en los últimos meses y acabó físicamente justo, pero sin que eso empañara su rendimiento. Lo importante fue que completó el encuentro entero y mostró pinceladas de la experiencia acumulada en la Premier League, LaLiga, Francia, Turquía y con la selección de Costa de Marfil.

Su debut confirma que el Oviedo ha incorporado a un central con un perfil diferente al del resto de la plantilla: móvil, potente en el juego aéreo y con recursos para sacar la pelota jugada. Paunovic insistió en verano en reforzar la defensa con un hombre de jerarquía, y Bailly parece encajar en ese rol a la perfección.

De cara al futuro, el costamarfileño se perfila como un pilar para el equipo azul. Si alcanza continuidad y regularidad física, el Tartiere puede haber encontrado un nuevo líder en la zaga. Y el debut ante el Barça, pese al 1-3 final, fue la mejor carta de presentación posible.