La letra pequeña (sorprendente) del contrato de Christian Rivera

A Christian Rivera le ha venido su lesión de rodilla en un gran momento de juego. Probablemente cuando mejor rendimiento estaba ofreciendo desde su fichaje en el verano de 2021. Con contrato hasta el 30 de junio de 2025, el Sporting de Gijón tiene una opción para rescindir su contrato. 

El suyo fue un refuerzo ilusionante. El gijonés volvía a casa, tras un par de cursos sin continuidad, pero después de haber demostrado sus altas capacidades incluso en Primera división. Tenía contrato con Las Palmas, renunció a él perdonando cantidades importantes, lo que de algún modo también influyó en su contrato con el equipo asturiano. Javi Rico, director deportivo en ese momento, se empeñó en su fichaje y le propuso un contrato largo con un salario importante. 

Ante las dudas que podía existir por la regularidad que no estaba teniendo, el club rojiblanco se reservó una opción de corte. Según recoge El Comercio, su vinculación puede concluir a partir del próximo 30 de junio. Hay varias condiciones para ello. En primer lugar, el Sporting debería mantenerse en Segunda división, la intención debería comunicarse con 15 días de antelación y, por último, sería necesario el pago de 20.000 euros para finalizar la relación. Una opción que seguramente se hubiese ejecutado en el caso de que hubiese sido posible al término de las dos temporadas anteriores. 

Sin embargo, la situación de Rivera es muy diferente este curso. El mediocentro, de 26 años, ha recuperado un muy buen nivel. Su aportación ha sido notable desde el mes de diciembre, siendo un fijo en las alineaciones de Miguel Ángel Ramírez. Su lesión de rodilla, en un entrenamiento de la semana pasada, ha supuesto un duro golpe para las prestaciones del equipo rojiblanco. 

Para su regreso aún habrá que esperar unas cuantas semanas. Los servicios médicos del club han estimado su vuelta a la actividad para finales de marzo o primeros de abril. Volverá en un momento capital de la campaña, en la que el Sporting espera estar en disposición de seguir luchando por los puestos altos de la clasificación.