La segunda línea del Oviedo: Una ecuación sin gol que condiciona el despegue azul
El equipo de Carrión suma siete goles en doce jornadas y casi ninguno lleva la firma de los jugadores que llegan por detrás de los delanteros
La Liga
El Real Oviedo de Luis Carrión ha dado pasos adelante en juego, intensidad y solidez, pero sigue teniendo un problema evidente: la segunda línea no marca. Tras doce jornadas, el equipo suma siete goles y casi ninguno procede de los futbolistas que actúan por detrás de los delanteros. Es una carencia que pesa en los partidos ajustados y que está condicionando el rendimiento ofensivo.
Los tantos se reparten entre Rondón y Viñas en la delantera, Dendoncker y Reina desde la medular, y el central David Carmo. Luka Ilic firmó un gol ante el Valencia, pero dentro de un contexto muy puntual. Más allá de esa acción, la producción ofensiva de la segunda línea es muy mejorable.
Uno de los nombres propios es Hassan, que acumula 663 minutos en lo que va de temporada. Pese a esa cifra, desde la llegada de Carrión ha ido perdiendo peso. Se le ve menos cerca del área, menos profundo y con menos capacidad de generar ocasiones. Su presencia ha caído y, con ella, la amenaza que solía ofrecer.
En el extremo contrario está Ilyas, que suma 630 minutos y se ha consolidado como uno de los jugadores más influyentes del equipo. Encara, desborda y genera peligro, especialmente desde la banda izquierda. Aun así, tampoco ha logrado transformar ninguna de sus llegadas en gol, un detalle que el equipo necesita mejorar para ser más completo.
La lesión de Brekalo, que había acumulado 307 minutos, también frenó su progresión justo cuando empezaba a asentarse en la rotación. Su posible regreso ante el Rayo puede aportar frescura, verticalidad y una opción real para mejorar el volumen ofensivo por fuera.
El caso de Luka Ilic, con 529 minutos, refleja bien la situación general. Ha alternado banda derecha y mediapunta, pero le está costando tener continuidad en los últimos metros. Su calidad es evidente, pero aparece por rachas y no consigue tener presencia constante en zona de remate. Su gol ante el Valencia fue un buen ejemplo de lo que puede ofrecer, pero necesita aparecer mucho más.
El regreso de Santi Cazorla, que había jugado 196 minutos antes de su lesión, puede ser clave en este apartado. El capitán azul no ha debutado aún con Carrión, pero su visión de juego, su golpeo y su capacidad para llegar desde atrás pueden ser justo lo que el equipo necesita para activar esa segunda oleada ofensiva que ahora mismo no existe. Su vuelta puede cambiar la dinámica.
Otro futbolista llamado a sumar cuando esté disponible es Ovi Ejaira, que lleva 154 minutos esta temporada. Lesionado desde el partido ante el Girona, es un jugador que aporta físico, conducción y presencia en campo rival. Aunque su vuelta no será inmediata, su perfil encaja perfectamente en lo que el Oviedo necesita.
En resumen, la segunda línea del conjunto azul ayuda mucho a que el equipo llegue, pero le falta dar el último paso: convertir esas llegadas en ocasiones claras y en gol. Carrión tiene argumentos para mejorar este apartado con las recuperaciones de Cazorla y Brekalo, y con la necesidad de que jugadores como Ilic o Hassan den un paso adelante. Si esa aportación aparece, el equipo puede crecer de forma importante en su rendimiento ofensivo.