Pachuca cambia las reglas

Corren tiempos renovados en el Real Oviedo. Desde el desembarco del Grupo Pachuca al club carbayón el pasado verano, la entidad mexicana ha ido dibujando con paso firme un nuevo proyecto. No solo en lo puramente futbolístico, también en lo ajeno al verde. Decisiones de calado como la renovación de la cúpula mayor, la llegada de Agustín Lleida como director general, cambios en la dirección deportiva y en los servicios médicos, o la puesta en marcha de una nueva ciudad deportiva, entre otras determinaciones.

Una de sus últimas decisiones fue la apuesta sin reservas por Álvaro Cervera, renovado hasta 2025. El técnico de Santa Isabel llegó en octubre para suplir a Jon Pérez Bolo en el banquillo azul, y desde entonces sus números arrojan un balance más que positivo en los 28 encuentros que ha dirigido: 13 victorias, 6 empates y 9 derrotas. Unos registros con trayectoria de play-off que han colocado a los azules octavos y con posibilidades - aunque remotas - de jugar la promoción de ascenso al final de la presente campaña.

Una dinámica que ha hecho entender al Grupo Pachuca que el guineano era la persona ideal para renovar las ilusiones del oviedismo la temporada que viene. Y no bajo los plazos de renovación que hasta ahora se habían establecido en el Real Oviedo. Había que dar un paso más allá. Hasta la fecha, ninguno de los siete entrenadores que dirigieron al conjunto azul desde su retorno al fútbol profesional en 2015 había sellado su compromiso más allá de una temporada. Ni siquiera los que permanecieron en Oviedo más de una campaña, Anquela y Ziganda, cuyo vínculo no se extendió ninguno más allá del final de curso. Una fórmula aplicada también con aquellos entrenadores cuyo paso fue más efímero: Egea, Generelo, Hierro, Rozada y Bolo.

Ahora el Grupo Pachuca decidió cambiar las normas y apostar de manera decidida por un entrenador cuyo currículo anterior también convence. Álvaro Cervera ya sabe lo que es comenzar un proyecto empezado e ir, paulatinamente, dándole su toque personal. Hasta el punto de convertir las ilusiones en éxitos, como el que consiguió con el Cádiz en 2020, nada menos que el ascenso a Primera División. Cervera cogió al equipo en 2016 en Segunda B, y cuatro años más tarde consiguió el ascenso a la élite del fútbol español. Un sueño que ahora perseguirá en el Real Oviedo.