Una de cal y otra de arena

La llegada de Abelardo es a priori una buena noticia para el Sporting, que ha confirmado a su nuevo entrenador que Javi Rico seguirá en el club

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Abelardo y Javi Rico
Javi Rico y Abelardo en la presentación del segundo.
Jue, 05/05/2022 - 11:10

No es novedad que la gestión del Consejo no se entienda fuera. Esta semana el Sporting de Gijón ofreció un motivo a sus seguidores para la esperanza. Para pensar que el descenso de categoría podrá evitarse con la llegada de Abelardo. Sin embargo, con el regreso del entrenador asturiano se confirma, una vez más, que Javi Rico seguirá en la dirección deportiva

Sería necesario, aunque no deje de ser una decisión empresarial legítima, que Javier Fernández hiciera un ejercicio de empatía. Que por un momento su pusiese en el lugar de una persona que sigue al día la actualidad de la entidad asturiana. En ese momento, entonces, comprendería lo sorprendente que resulta su confianza en Javi Rico. Un director deportivo que a lo largo de sus dos años en el cargo ha sido centro de atención por su mala relación con los jugadores, representantes y empleados que tienen un cargo de menor responsabilidad. Ocurre todo lo contrario con sus superiores, servil ante ellos y haciendo gala de su habilidad para ver cumplidas sus peticiones. Una de ellas la salida de Noé Calleja, adelantada por este medio, que él mismo desmintió y que tres meses después se confirmó. Fernández debería intentar explicar con motivos por qué Javi Rico sigue en el club. Quizá así podamos entender lo que parece el mayor de los sinsentidos. 

"Ya lo dijo el presidente una, dos y tres veces. Tengo su confianza", dijo Rico en la presentación de Abelardo. Palabras que recuerdan al origen de la exclusiva que contó Killer cuando tras el partido del Huesca se produjo el episodio desagradable entre Javier Martínez y David Gallego, con la posterior 'mediación' de Javi Rico. Todo comenzó con el entrenador reclamando al vicepresidente una promesa acerca de su continuidad. Sus declaraciones de ayer, dejando constancia de las afirmaciones del presidente, tienen un aspecto similar. Eso es lo que lleva haciendo Rico en los últimos meses, agarrarse a su cargo como sea

Y esto es el Sporting actual. Puede dar una alegría, puede llegar gente nueva que alimente la esperanza, pero el fondo sigue siendo el mismo. La lógica es una palabra vacía o desconocida en las oficinas de Mareo. La falta de razones a la vista de todos genera una sospecha que tampoco tiene fundamento alguno. Es evidente que algo se nos escapa. Por eso estaría bien que el presidente comparta la luz que ilumina su fe en la labor del director deportivo.